- Son 8 años seguidos del Coruxo en Segunda B ¿Cuál es el nivel de exigencia en O Vao una vez que la categoría está más que consolidada?

- Siempre pensamos que estamos en la obligación de exigirnos más y de mejorar lo que hemos hecho. Nunca perdemos la perspectiva y tenemos los pies en la tierra, partiendo de un objetivo que es obligado como la permanencia, pero sí es cierto que nos gustaría transitar por la liga siendo un equipo protagonista. La posibilidad de que esto sea así es que te instales en la parte media/alta de la tabla y a partir de ahí, según se vayan dando los resultados, tratar de llegar al último tercio de liga en estas posiciones, que al final este tramo es el que consolida los objetivos de cada temporada.

- Usted que conoce bien la casa granate ¿cree que las exigencias con las que se enfrenta el Pontevedra son justas?

- A veces es bueno recordar de dónde viene uno y los sufrimientos que se pasaron cuando el equipo estaba disputando promociones de ascenso a Segunda B y no conseguía subir. Hay que valorar esas cosas y poner mucho más en valor el hecho de que la temporada pasada fuesen capaces de jugar un play off, dejando fuera de esa posibilidad a equipos de la importancia de la Ponferradina o el Rácing de Ferrol. Por el mero hecho de que el arranque no fuese bueno, esto no le debe de restar posibilidades. El Pontevedra tiene una muy buena plantilla y un patrimonio muy importante que no tienen en la categoría más que dos o tres clubs, que es una afición que es inigualable en el apoyo a su equipo. En cualquier momento pueden encontrar esta oportunidad de engancharse a los puestos cabeceros, aunque es cierto que para eso hay que mantener una regularidad, esto es muy largo y en 38 partidos hay momentos para todo.