El Pontevedra ha buscado a un hombre de la casa y con experiencia en los banquillos para tomar las riendas de su equipo juvenil de División de Honor en el año de su retorno a la máxima categoría estatal.

Si el curso pasado en el cargado de hacer que los canteranos fue un ex jugador pasado recientemente a los banquillos como fue el caso de Óscar Guimeráns, para esta nueva temporada el perfil a buscar de la dirección deportiva de la base, personificada en las figuras de Roberto Feáns y Jesús Ramos, es muy similar.

Luis Miguel Areda Figueirio, Luismi, es el entrenador escogido para esta nueva aventura en División de Honor en la que tendrá la difícil misión de consolidar al grupo en una exigente categoría en la que tendrá delante a equipos de primer nivel como el Celta el Deportivo de la Coruña o el Sporting de Gijón.

Luismi tiene 42 años y llega al Pontevedra después de un periplo importante por equipos de Regional Preferente como el Mondariz o el Atios. También tiene experiencia como entrenador de base al haber dirigido al equipo de Nacional del Celta de Vigo. Se trata de una persona que conoce el club desde dentro, ya que formó parte como defensa central del Pontevedra entre los años 1998 y 2003.