A pesar de las quejas llegadas desde Las Palmas, todo apunta a que gallegos y madrileños volverán a coincidir en el grupo I después de cuatro campañas separados. El Pontevedra no se veía las caras con ellos en un partido de liga desde la campaña 2010-2011, aquel fatídico curso en el que sucumbieron al infierno de Tercera del que tanto costó volver a salir.

Este año el arsenal de gallegos y madrileños está empatado; siete contra siete. Ambos monopolizan un grupo que es complementado por conjuntos de las dos Castillas. El empate también está patente en cuanto a potencial play off, Pontevedra y Celta B representaron a Galicia en la fase de ascenso de la pasada temporada y Fuenlabrada y Rayo Majadahonda hicieron lo propio con su comunidad, curiosamente ambos casos con un tercer y cuarto puesto en la clasificación. Las similitudes entre ambas comunidades también se dan en el número de filiales que aportan a la competición. No así en el de ascendidos, ya que Galicia contará con dos recién llegados a la división de bronce frente al único de Madrid.

Toda vez que el club pontevedrés parece que se volverá a encontrar entre sus rivales a los clubs de la comunidad de la capital de España, cabe recordar que su presencia en el grupo casi siempre ha sido garantía de cosas importantes para los granates a final de campaña en este siglo XXI.

Hasta seis veces se han enfrentado los granates con los madrileños en su liga desde la temporada 2000-2001 y precisamente fue esa primera en la única en la que la temporada no concluyó con resultados a destacar. En el resto de ocasiones el cuadro lerezano siempre acabó la liga disputando fase de ascenso (02/03, 05/06, 06/07 y 07/08) hasta que llegó el fatídico descenso del 2011.

Otra de las ventajas de jugar contra clubes cercanos de esta zona es la posibilidad de que los jugadores de Luisito se vean más arropados en sus desplazamientos debido a la pequeña comunidad de pontevedreses y aficionados al club que actualmente residen en la capital de España por motivos laborales o de estudios.

Rayo Vallecano

Si algo destaca del emparejamiento entre Pontevedra y Madrid en los últimos años esto ha sido las interesantes luchas vividas con el Rayo Vallecano. Los franjirrojos hoy ya pelean por otras cosas distintas, pero durante tres temporadas consecutivas se vivieron duelos de auténtico voltaje que comenzaron con un polémico arbitraje en 2005 en el que la presidenta rayista, Teresa Rivero, denunció un intento de agresión en el estadio de Pasarón. En los dos años siguientes ambos equipos se repartieron el liderato y el subcampeonato al final de la temporada.