Superada la polémica visita del Real Madrid a Balaídos, el Celta ha de centrarse ya en cerrar de la mejor manera posible un curso futbolístico que pasará a la historia del club por haber disfrutado de su primera semifinal europea. Sin apenas tiempo para las lamentaciones por la sexta derrota consecutiva en la Liga, el equipo de Eduardo Berizzo preparará desde esta mañana el partido que el domingo le enfrentará en el estadio de Balaídos a la Real Sociedad (16.45 horas).

La presencia en Vigo del conjunto que entrena Eusebio Sacristán, con el vigués Juan Carlos Andrés como segundo preparador, supondrá la clausura de una intensa temporada para los célticos, que alcanzarán así los sesenta compromisos oficiales en nueve meses de competición.

A la despedida de Carles Planas, pues el club no ha querido renovar al lateral catalán, podría unirse la de algún otro jugador con contrato en vigor que no tendrá la oportunidad de continuar en Vigo, pues el club pretende aligerar la plantilla porque el próximo curso solamente afrontará dos competiciones: Liga y Copa del Rey.

Además, se mantiene en el aire la continuidad de Eduardo Berizzo, quien ha venido anunciando en los últimos días que antes del partido contra la Real Sociedad haría públicos sus planes profesionales de futuro: si cierra la etapa de tres años como técnico del equipo de Balaídos o da continuidad al proyecto de llevar al club vigués a conquistar el primer título de su historia.

Con el argentino al mando, el Celta ha quedado en tres ocasiones a las puertas de pelear por uno de los trofeos oficiales, pues en las dos últimas ediciones de la Copa del Rey alcanzó las semifinales y lo mismo ha conseguido en esta ocasión en la Europa League. Sevilla, Alavés y Manchester United han impedido que los de Berizzo se plantasen en el partido definitivo de la segunda competición española y europea, respectivamente.

Las diferencias económicas entre el club y el preparador argentino retrasan la resolución final, para la que Balaídos ya expresó el miércoles sus deseos: "¡Berizzo, quédate!", clamaba la afición en diferentes momento del partido con los nuevos líderes de Primera División. Porque a pesar de igualar la peor racha de derrotas consecutivas que Berizzo acumulaba con el Celta en la Liga, el argentino conserva el cariño de una afición que valora lo realizado por el equipo en los últimos años, en los que ha ido mejorando con una apuesta por un fútbol vistoso y atrevido.

Tras presentar ante el Real Madrid el equipo de gala, con la excepción del lesionado Nemanja Radoja, el preparador argentino buscará posiblemente una fórmula mixta para confeccionar el once que el domingo por la tarde se presentará en Balaídos con la intención de superar a la Real Sociedad.

El conjunto vasco, séptimo clasificado, carece de riesgos de empeorar en la tabla clasificatoria durante esta última jornada, pues suma nueve puntos más que el Eibar. Si el Barcelona le gana la Copa del Rey al Alavés, los de Eusebio Sacristán volverán el próximo curso a competir en la Europa League. En ese caso, estarían obligados a disputar fases previas. Pero todavía cuentan con opciones de alcanzar el quinto o el sexto puesto, de los que solamente les separa un punto. Dependerán del resultado que obtengan en Balaídos y de lo que hagan Athletic Club ante el Atlético de Madrid (en la despedida del Vicente Calderón) y el Villarreal en Valencia.

En la primera vuelta, el equipo txuri urdin ganó por la mínima a un Celta que estaba en pleno fragor de la batalla por seguir vivo en la Copa del Rey y en la Europa League. Ese día, Berizzo presentó un once con mezcla de la primera y de la segunda unidad. El gol de Juanmi en el minuto 71 le privó del empate.

La apuesta europea ha llevado a los de Berizzo ha encadenar seis derrotas consecutivas, igualando así la peor racha de resultados del argentino en Vigo. La anterior ocurrió en la temporada 2014-15, después del sorprendente triunfo del Celta en el Camp Nou. Tras un empate en Balaídos contra el Granada, en las siguientes seis jornadas no consiguió ni un solo punto. En ese periodo encajó 8 goles y no sumó ni uno. En esta ocasión lleva 16 goles en contra y 3 a favor. Los de Berizzo son decimoterceros, con 44 puntos, dos menos que Valencia y Málaga, a los que podría superar en la clasificación. Para ello, tendrá que ganar al equipo de Eusebio Sacristán.