Le ha costado unas semanas, pero ya asentado en el once titular de Luisito, Adrián Mouriño disfrutó el pasado domingo de los 90 minutos por primera vez desde esa apendicitis que le obligó a frenar bruscamente la temporada las pasadas navidades cuando estaba, probablemente, en su mejor momento deportivo desde que viste la camiseta del Pontevedra.

- Noventa minutos después de varios meses sin hacerlo, ¿cómo se sintió en el campo?

- Bien, la verdad es que pensé que quizás en la segunda parte con el paso de los minutos podría acusar un poco más el cansancio pero creo que aguanté bien.

- ¿Había algún motivo, ya sea por físico o por otras razones, que hicieran que siempre fuese uno de los jugadores cambiados o es algo que responde al criterio de Luisito?

- El míster a mí ya me conoce muy bien y sabe cuando aguanto y cuando no. Una cosa es que yo me encuentre de una manera y que le diga que estoy bien y otra es que él, que es el entrenador y me conoce perfectamente, sepa desde fuera por cómo estoy actuando y cómo me estoy moviendo que quizás esté algo cansado. En estos últimos partidos en los que jugué menos tiempo él entendió que lo mejor era cambiarme y el pasado domingo me dio la oportunidad de estar los 90 minutos. Luisito ya sabe lo que puedo aguantar y lo que puedo dar físicamente.

- En un principio parecía que le costaba un poco entrar. Sorprendió que al comienzo de liga jugadores como usted o Jacobo, titulares el año pasado, no fueron igual de indiscutibles. Ahora ya está asentado en el once de nuevo.

- Eso es lo mejor que nos puede pasar a cualquier jugador. Es necesario que en el equipo tengamos competencia para saber que entrenamiento a entrenamiento debemos pelear para ganarnos el puesto. Solo así nos podemos hacer mejores los unos a los otros y podemos estar alerta para amarrar el puesto como sea porque a la mínima sabes que va a haber otro compañero en el banquillo que va a poder entrar. Estoy contento por lo que me toca ahora al estar jugando, pero debo seguir trabajando duro para poder continuar contando para el míster.

- ¿Se quitaron un peso de encima ganando al Lealtad tras la derrota en la final contra el Arosa y siendo el partido en una fecha señalada?

- Nos dolió bastante la derrota de copa el miércoles porque era una final y en partidos así siempre quieres ganar, además era una semana importante para el club. Tuvimos que dejar todo eso atrás para centrarnos en la fiesta del 75 aniversario en Pasarón porque sabíamos que iba a venir mucha gente al campo. Por suerte todo salió bien aunque reconozco que no fue de las mejores primeras partes que hemos hecho, sí creo que hicimos una buena segunda mitad. Cuando entró el primer gol ya fue quizás un poquito más llevadero el partido. Lo mejor de todo fue haber conseguido los tres puntos en un día importante, que eso es lo que importa.

- En esta buena dinámica por la que están pasando, los veteranos están cuajando un papel importante por la adaptación los nuevos. Alguno parece que lleve toda la vida jugando aquí.

- Igual que pasó el año pasado los jugadores que llegaron nuevos se adaptaron al equipo perfectamente. Estamos muy contentos porque nos damos cuenta de que hay un gran vestuario y en eso Luisito también tiene parte de culpa. Todos somos conscientes de que es necesario fichar a buenos jugadores pero lo importante en el fútbol también es ser buena persona y ser buen compañero. Hay que jugar bien y llevarse bien con todos los compañeros. Por suerte estos años, y especialmente este, el vestuario es genial, con gente muy sana y muy buena tanto por parte de los que ya estaban como los que llegaron ahora. Todos los que llegaron nuevos me han sorprendido para bien, tanto los que conocía más como a los que no conocía de nada.