El Marín Ence Peixegalego puede dar un paso muy importante este sábado de conseguir sacar algo positivo de la cancha de Club Basquet Tarragona.

El equipo marinense aventaja en dos victorias a sus perseguidores y se debe medir ahora a un rival peligroso que viene de ganar en la Ávila a todo un finalista de copa LEB Plata como el Óbila, quien está de capa caída tras perder la final copera ante los de Javi Llorente.

Los precedentes son buenos para el Peixe, pues el duelo ante los tarraconenses en la primera vuelta fue una de las victorias más contundentes del arranque del presente curso con un +15 de diferencia.

Además el duelo directo entre dos de los equipos en mejor forma de la liga como el Covirán Granada y el Sammic, descolgará a uno de los cuatro equipos que acechan esa posición de líder.

Tras 18 jornadas disputadas y a falta de ocho para que concluya la liga, al Peixe le podrían valer seis victorias para certificar el ascenso directo siempre que el Arraberri, con el que tiene perdido el basket average, no gane todos sus partidos.

En la pasada temporada la plaza de ascenso directo fue a parar a manos del Cáceres Patrimonio de la Humanidad, un equipo que por estas alturas de la campaña llevaba una derrota más que los azules y ocupaba la segunda posición en la tabla clasificatoria.

Apoyados en uno de los tres mejores ataques de la liga, los de A Raña están superando con creces el tremendo año realizado el curso pasado y de aquí a final de temporada tendrán que realizar dos visitas de gran dificultad como son las de Granada y Azpeitia, canchas de las que podrían salir con medio ascenso en el bolsillo.