El entrenador del Coruxo dijo en sala de prensa que "la sensación que me queda es de tristeza, porque, sin hacer un buen partido a nivel de juego, pienso que en el marcador pudimos igualar el partido, aunque fuera de penalti en una jugada aislada. A partir de ahí, tiros entre los tres palos del Logroñés, después del gol, pocos más. Por equilibrio de fuerzas, reconociendo que no fue un buen encuentro, creo que el Coruxo estuvo en una buena línea".

Sobre el cambio de posición de los laterales, Sáez dijo que "sabíamos que el Logroñés tenía una banda que jugaba en amplitud, en este caso Titi, muy pegado a la línea, siempre encima de ella, con mucho desequilibrio en el uno contra uno, y un jugador en banda izquierda, Pere Milla, que no es extremo, sino un interior y que daba menos amplitud. El peligro venía por la banda derecha y es cierto que un poco lo que quisimos era tratar de cambiar los registros defensivos, ya que en esos momentos Titi estaba saliendo muy airoso del choque".