El banquillo dio la solución al Pontevedra. El suplente Kevin Levis se erigió como el protagonista de la tarde en Pasarón al rescatar a su equipo de un partido apático y hacerlo solo dos minutos después de pisar el césped. El gol del delantero argentino, en el minuto 71, supuso un antes y un después en la cita contra el Rápido de Bouzas. Imprimió carácter a los granates, que tuvieron alguna ocasión más desde entonces. El conjunto vigués esperó demasiado a buscar sus opciones, pero estuvo a punto de amargar la jornada a su rival con sus embestidas del tramo final. Edu también se convirtió entonces en determinante para que los granates se afiancen en la zona de play off.

Ninguno de los dos equipos se sintió cómodo en los compases iniciales. El Pontevedra evidenciaba cierto agarrotamiento ante la autoimpuesta presión de ganar en casa después de los dos últimos fiascos en Pasarón. El Rápido tampoco era capaz de hilar un fútbol convincente. Como consecuencia, la primera parte careció de interés para la grada, desde la que apenas se pudieron observar un puñado de tímidas ocasiones, casi todas ellas de falta.

Lo llamativo, en el caso del Pontevedra, se centraba en su alineación, con el canterano Héctor en el lateral derecho y Benja, que se incorporó al once titular en detrimento de Javi Otero. También el regreso del pichichi del equipo, Pablo Carnero, era una de las novedades. Pero ninguna de ellas resultó clave a lo largo de estos 45 minutos.

Los de Juan Carlos Andrés trataban de adelantarse por medio de las acciones que Chema iniciaba a balón parado. La primera de ellas fue en el minutos siete, una de las más acertadas de los visitantes y que Diz envió al costado de la portería. Luego llegarían otras en los minutos 32 y 34, pero carentes de peligro. Los de Manu Fernández, entre tanto, no ofrecían mucho más. Solo puntualmente. Así, David García, en un portentoso córner, obligó a Ferré a estirarse para despejar por alto. Luego, justo antes del descanso, los pontevedreses estuvieron a punto de adelantarse en el marcador en una jugada iniciada por Feito y que colgó un balón al área cuyo remate se marchó desviado apenas unos centímetros.

El intermedio sentó bastante mejor al Pontevedra, que regresó al terreno de juego con una actitud completamente distinta. Intensidad desde el primer minuto y una serie de cambios en el equipo se convirtieron en la clave que impulsó al fin un conjunto que hasta entonces rendía a medio gas. Desde que comenzó el segundo tiempo fue notoria la mejoría del Pontevedra ante un Rápido que continuaba sin hallar remedio a su falta de iniciativa.

Que las cosas habían cambiado se notó tan pronto como se produjo la reanudación. Tubo, David García y Lede construían en el minuto 51 una jugada muy distinta a las del primer tiempo. La más llamativa fue en el 58, anulada por fuera de juego, en la que Benja envió de chilena el balón y a la red tras un pase de Carnero. El balón empezaba a fluir y el Rápido tenía que correr más para frenar al Pontevedra.

El técnico local, en plena mejoría de los suyos, apostó por dar nuevos bríos para completar esa reacción. Primero lo hizo reemplazando a Benja por Moreira. El centrocampista aportó mayor movilidad y entusiasmo. Pero fue la entrada de Kevin Levis la que supuso el gran punto de inflexión. El jugador, segundo mayor anotador del equipo, sustituyó a Lede. En menos de dos minutos desde que entró al campo ya estaba celebrando el que sería el definitivo 1-0. Tras un centro de Moreira, remató de cabeza y, en el rechace, metió con el pie.

Ponerse por delante sirvió de combustible a un equipo que aceleraba cada vez más. Pablo Carnero tuvo ocasiones para sentenciar el encuentro. En una de ellas, en el minuto 76, fue el defensa Fran quien sacó el balón bajo palos. Después también Kevin contó con otra oportunidad, anulada por fuera de juego.

El Rápido, por su parte, acabó sumándose al nuevo ritmo del duelo. Y a punto estuvo de igualar el marcador. Edu, en el minuto 78, salvó con el pie un remate de Tomás. Los vigueses no se rindieron en su objetivo de arañar un punto en Pasarón. En el descuento, el capitán, Chema, envió al poste un potente disparo.

La fortuna sonrió al Pontevedra en estos últimos instantes y le permitió celebrar un esperado triunfo después de más de un mes sin ganar en Pasarón. La victoria le mantiene tercero en la tabla, pero amplía las diferencias con la quinta plaza. Además, el liderato continúa a solo dos puntos.