Los socios del Club Natación Galaico Pontevedra demostraron ayer su total disconformidad con la gestión del presidente Alfonso Gallego desde que se hizo cargo de la entidad en el año 2011. A petición propia, el dirigente convocó una asamblea general extraordinaria con dos puntos.

El primero consistente en reajustar el presupuesto de la temporada 2012-2013, contó con 68 votos en contra y solo 9 a favor, la mayoría de ellos de sus directivos. Los socios le hicieron saber que no hay ninguna confianza en hacer una derrama tras comprobar que se ha dilapidado mucho dinero desde su llegada a la presidencia, pues la anterior directiva había dejado un remanente de más cien mil euros.

En la anterior asamblea a finales de año había manifestado que no existía ninguna acta de cuando se hizo cargo del club, aunque ahora reconoció que había aparecido.

El otro punto que se votó fue el ajuste de los salarios de los entrenadores y de nuevo tuvo a todos los socios en su contra. La asamblea no entiende cómo se le quiere recortar el sueldo a los entrenadores, cuando los nadadores que se desplazan a Ourense para participar en una competición pernoctan en esa ciudad en lugar de regresar en el día, lo que supone un gran gasto para el club.