fútbol - Segunda Federación

El Arenteiro vence en As Eiroas y es aún más líder

Se llevaron tres puntos de su visita a Bergantiños en un intenso derbi gallego

Pibe protegiendo el cuero ante Josiño en As Eiroas. |  // MANUEL CID

Pibe protegiendo el cuero ante Josiño en As Eiroas. | // MANUEL CID / l.G.

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El Club Deportivo Arenteiro se desplazó en la tarde de ayer hasta tierras coruñesas para medirse en su segundo encuentro de segunda vuelta ante el Bergantiños en As Eiroas, en una cita que fue, como prometían ambas escuadras, intensa . Advertía el entrenador de los locales en la previa, Jose Durán, que no pondrían las cosas fáciles a los carballiñeses y que no dejarían que se sintiesen cómodos, y cumplieron con lo exigido por el entrenador. Pero el líder se proclamó aún más líder después de una reñida disputa.

Los locales comenzaron el partido demostrando lo que querían: controlar desde los primeros compases para redimirse de su derrota ante la Gimnástica de Torrelavega. Y así apostaban por un ritmo alto embotellando a los verdes y jugando a placer en su campo.

Pero duró el impulso inicial quince minutos hasta que los carballiñeses comenzaron a responder con solvencia, teniendo la primera oportunidad de peligro en una falta que lanzó desviada Pibe. El aviso fue el preámbulo del primer tanto de muchos, un pase de Joseca desde la banda, le cayó a Markitos colocado para, de un cabezazo, poner a los suyos por delante en el ecuador de la primera parte.

Y aún con el meta lamentando la jugada llegó el segundo, Escobar se topó un balón en el vértice del área, por un error defensivo, y sin titubear sumaba uno más al luminoso, 0-2.

Suficiente para que el Bergantiños aumentase la presión y recuperase verticalidad. Llegó Pacheco al área, esquivó a Joseca y lanzó. Parecía el gol, pero Diego García desviba con los pies. No obstante, los locales querían llevarse una alegría y ese fue la primera de hasta tres llegadas consecutivas, llevándose en la última el premio. Uzal centró a Iván Garrido y este atravesó a Diego en el minuto 31.

Pero, cuando el partido estaba al rojo vivo, un fallo eléctrico en la iluminación del campo obligó a la suspensión momentánea. Con tan solo la luz de la grada de tribuna, se abrigaron jugadores y árbitros a la espera de que fuese poco tiempo y no se debilitase un ritmo que solo iba a más y que, tras quince minutos, regresó como se había quedado. Lo intentó el Bergantiños con un disparo que se marchó desviado y con un lanzamiento de Remisero que dio en el vértice de la escuadra.

A la reanudación, la intensidad solo siguió en aumento y de ella sacó provecho Escobar, en un mal entendimiento entre Canedo y la defensa, el jugador carballiñés encontró el espacio y anotó el tercero. Tal era el nerviosismo que Pol Bueso corrió en exceso y acabó cayéndose del otro lado de las barreras protectoras del campo. Fue un susto, pero diez minutos después pidió cambio. No sin antes ver como su equipo encajaba el que sería el último gol del derbi, saque del esquina del Bergan, tira Uzal fuera, recupera el rechace Pedrosa, da al palo y aparece en escena Josiño que ayer debutaba con los de Coruña haciéndolo con acierto, 2-3.

Todo, en los primeros diez minutos tras el descanso. Quedaba por tanto mucho partido, pero el Arenteiro ya no presumió de ocasiones, se afanó en proteger el botín de un Bergantiños que quiere cambiar su dinámica y que a punto estuvo de lograrlo con un remate de Agulló que acabó en las manos de Diego.