El Ourense CF tenía ayer la oportunidad de ajustar aún más los puestos altos de la clasificación sumando de 3 ante el colista de la misma, la Sociedad Deportiva Sofán. Con una victoria los pontinos habrían empatado con el segundo, el Somozas, y se habrían quedado a tan solo uno del líder, el Polvorín, pero fue el cuento de la lechera; el resultado un empate. 

Bien es cierto que era el cuarto partido de los de Rubén Domínguez en apenas 11 días y el cansancio se hizo notar. La primera oportunidad fue para Iker Hurtado quien, a pesar de quedar solo ante el portero, falló el que pudo haber sido el 1-0. El ritmo lo marcaba el conjunto visitante, lento y perdiendo tanto tiempo que recibieron llamada de atención arbitral, pero dominaban los de Carballo avisando por las bandas. Todo hasta que una falta sobre Amín en una jugada dentro del área se transformó en el penalti que Iker Hurtado convirtió en el 1-0, esta vez sí, antes del descanso. 

Tras la reanudación, gran jugada por banda de Hugo Sanz cuyo centro remata fuera Gabri Palmás, pero suponía el aviso porque el gol de la tranquilidad llegaba cinco minutos después, de su bota, tras un gran pase interior de Manu Mosquera en una jugada iniciada por Amín. Pero lo que parecía la sentencia vio la respuesta de Martín Pereira en el 82, 2-1 y la cosa no quedó ahí, en el tiempo de prolongación empató el colista quien a su vez empata a puntos con otro conjunto ourensano, el Atlético Arnoia.