El Ourense CF terminó una intensa semana en la que todo fueron derbis de altura. Entre semana se enfrentó al Polvorín en el Municipal de Pol y cayó por la mínima, una situación que buscaba remediar ayer en casa ante el que era líder de la categoría, el Somozas, y lo consiguió con goleada. 

Los de Rubén Domínguez marcaban la cita en rojo en el calendario con el objetivo de escalar en la tabla, así saltaron al campo con ambición logrando, antes de los primeros 15 minutos, dos tiros desde fuera del área por parte de Jerín que marcaban el ritmo del envite. Sin embargo la acción más peligrosa, antes del gol, fue un disparo al palo de Tiago tan solo cinco minutos antes de que Gabri Palmás abriese el marcador: un robo de balón en la salida del Somozas de Jerín, este pasó a Nacho y él abrió a Gabri que, con un tiro raso, encendió el electrónico. 

Era la chispa que hacía falta para el incendio, cinco minutos después Amín montó una contra rápida que, con buena definición, propició el 2-0 para el descanso.

Tras la reanudación, la confianza estaba a favor de los azules que arrancaban con un cabezazo de Kanteh que paró Marcos Souto cuando ya se cantaba el gol en la grada. Fue el preámbulo para Tiago, tras tener su intento en la primera parte sacó rédito en la segunda, anotó el tercer tanto y, aún con el Somozas recuperando aliento y vislumbrando los treinta minutos de partido con esperanza, hizo el cuarto y sentenció.