La lucha libre es el deporte de contacto más antiguo registrado, remontándose sus orígenes al 708 A.C en los primeros Juegos Olímpicos. También es el deporte que se puede practicar en un único club de todo Ourense, el Club Atila.
Atila es una escuela deportiva que se formó en 2004 de la mano de Jacobo Nóvoa y Óscar Fernández, ambos entrenadores y luchadores en activo que trabajan principalmente con las categorías junior y senior. Eso ahora, en los comienzos el club lo formaban poco más de cinco personas, todas ellas luchadores de alto nivel, pero no fue hasta 2010, con ayuda del Consello Municipal de Deportes, cuando iniciaron el proyecto para promocionar la lucha entre los más pequeños, un proyecto que continúa.
“Empezamos tirando unas colchonetas debajo de unas gradas de las infraestructuras de Oira, una zona que compartíamos con tiro con arco, ellos recogían y nosotros empezábamos y viceversa”, recuerda Jacobo Nóvoa, que subraya que lo más importante “fue soñar a lo grande desde el principio, gracias a ello se llegó a lo que es hoy en día. Hemos puesto el nombre de Ourense y el del grupo Atila en el mapa nacional con los logros conseguidos por las categorías base”, celebra.
Ya no hay colchonetas de quita y pon debajo de las gradas, ahora los entrenamientos son en O Pompeo, un pabellón al que las categorías base acuden martes y jueves entre las 19.00 y las 20.00 horas, mientras que cadetes, junior y senior de 20.00 a 21.00 los mismos días y los sábados entre las 11.00 y las 13.00 horas. Así es como preparan tres disciplinas: lucha libre olímpica, lucha grecorromana y lucha libre femenina, la última en sumarse no solo al club sino también a las competiciones y, con ello, también uno de los últimos títulos adquiridos por el equipo, son campeones gallegos de las tres disciplinas.
“Este 2021 lo cerramos con los tres títulos, campeones en libre, greco y femenina, a nivel gallego. Realmente no nos podemos quejar, estamos en unos años muy buenos gracias a los esfuerzos de la base, hay nivel, tenemos varios campeones de España como Raquel Bravo en libre femenina, o Gonzalo Caparrós y Carlos Grediaga, ambos en grecorromana”, presume el entrenador que ya pone el foco en este 2022, “a finales de mes tenemos el Autonómico en Santiago de Compostela, es la cita importante para el Nacional a donde esperamos llegar y subirnos al pódium, lo hemos hecho otras veces y esta no puede ser diferente, hay cantera para ello”.
Próximo objetivo: el Europeo
Dice Jacobo que empezaron soñando alto pero que surtió efecto y por ello ese es el camino en el que quieren continuar, a este año no le piden suerte en las competiciones, porque confían de sobra en el equipo, le piden “algo más de manga ancha a las restricciones de las Federaciones, a causa de la situación sanitaria a penas ha habido competiciones internacionales y es una pena para estos chicos que podrían competir en un Europeo, una gran experiencia en la que se aprende mucho y se abren cantidad de horizontes”.
