“Fue una locura absoluta, para nada estaba previsto, llegué a Espiñedo sobre las 09.45 horas y me encontré una cola que superaba las 100 personas, ¿cómo íbamos a contar con eso? Me acerqué al primero de la fila y le pregunté desde que hora estaba allí, ¿sabes qué dijo? Que desde las 07.00 horas... increíble, no hay palabras”.

Así muestra su sorpresa y su felicidad el presidente del Club Deportivo Arenteiro, Argimiro Marnotes. Y no es para menos, el club recibe este jueves a las 19.00 horas al Valencia en la disputa de la segunda eliminatoria de la Copa del Rey y la ‘fiebre’ por ver a un Primera División sobre el terreno de juego de O Carballiño fue tal que, en las tres horas que abrió la taquilla en la mañana de ayer, se agotaron las entradas.

“Ayer se venderían sobre 700 entradas, vimos tanta gente en la cola que tuvimos que poner que cada uno se llevase un máximo de tres para que pudiese ir repartido y aún así no llegó a la gente que se acercó a la tarde , si tuviésemos un mayor espacio lo llenaríamos, haríamos tres Espiñedos, de verdad que parece esto la final de la Champions”, esgrime el presidente.

En total, un aforo de aproximadamente 2.000 personas, “ los socios tenían prioridad, y hay algo más de 900, no todos han podido entrar porque avisamos por activa y por pasiva y se relajaron, ahora aunque presenten el carné de donde no hay no se puede sacar”, aunque aún no se pierde la fe, “vamos a hacer recuento oficial y diremos si queda alguna pero está complicado, va a ser un éxito rotundo, hasta la bandera”, celebra Marnotes.