El diván espera una semana más a Kike García y sus futbolistas. Quinta derrota en cinco partidos del Sala Ourense, que al minuto de juego ya perdía, que a los ocho ya caminaba 0-2, que a los diez había recibido el tercero.

No fue hasta entonces cuando decidieron comparecer los locales, entre los mejores el curso pasado, anclados a la última posición ésta. David Bermejo recortó la desventaja a los trece minutos, poco después que el guardameta Toki tuviese que dejar su puesto. Entró Dani Pérez, que evitó ante Marcos Álvarez y Alberto que los ferrolanos pusiesen más tierra de por medio. El que sí acertó fue Martín Justo, para estrechar el resultado y toda la segunda parte por delante.

Ocurre que Arturo vio la segunda amarilla y los ourensanos tuvieron que defender a muerte esa inferioridad. Salieron adelante, pero para no encajar más, no para al menos igualar. Algún día escampará.