Adri Castro decide fichar por el Ourense CF. "Acerté, totalmente. Ya les seguía, ya había visto que la temporada pasada hicieron una segunda vuelta espectacular, les faltó un punto para jugar el play off. Es un club muy serio, no tengo la menor queja. Después de dos años en el Laracha, buscaba un equipo que pelease por estar muy arriba. Acerté".

Qué lejos queda aquella victoria en Madrid con la selección, ¿verdad? "Queda lejos, aunque la final ya la jugamos a puerta cerrada, ya se veía venir esto de la epidemia. Lo que nos ha pasado es increíble, aún hoy continúo asimilándolo, preguntándome qué ha pasado".

¿Tiene miedo ante los partidos? "No, ninguno, aunque entiendo que haya gente que sí. Hombre, un poco sí es verdad que deberíamos tener, hemos comprobado que esto no es una broma, se me hace raro ir con la mascarilla, mantener la distancia, hablar con mis amigos sin poder acercarme...", detalla Adri Castro, que espera entre el 1 y el 5 de junio pasar las pruebas del Covid en Ourense junto a sus compañeros y retomar los entrenamientos a partir del 8.

Atrás queda la cuarentena, en un piso de A Coruña junto a su madre, una hermana "y dos perritas". En el horizonte, partidos a solas, sin aficionados. O con muy pocos. "A nadie le gusta jugar así, pero lo hice en alevines, venía mi padre y el padre de un compañero, así que...", termina.