Alivio para el fútbol que no es profesional, el que va de Segunda B para abajo. Porque Luis Rubiales, el presidente de la Federación, anunció el adelanto de cuatro millones de euros para los clubes con los que intentar parar la batería de Expedientes de Regulación Temporales de Empleo, que entre otros ya ha acometido el Arosa y está a punto de iniciar el Ourense CF. Ese dinero -el miércoles el Alondras anunció el aplazamiento en el pago de las mensualidades mientras dure el estado de alarma-, destinado a pagar a futbolistas, entrenadores y empleados, se podrá devolver a lo largo de dos años con un interés cero. A este dinero podrán acceder los clubes de Segunda B y Tercera pero también los de fútbol sala (Ourense Envialia, Cidade de As Burgas y Sala Oureanse).

Asimismo, la Federación pondrá a disposición de los clubes un servicio de psicólogos y fisioterapeutas como apoyo al ámbito sanitario y asistencial, además que reitera la posibilidad de utilizar el hotel residencia de la Ciudad del Fútbol, en Las Rozas, como hospital.

Igualmente, Rubiales se comprometió a poner en marcha de manera inmediata las ayudas de solidaridad de la Uefa, destinando para la Tercera división, por vez primera, una cantidad ligeramente superior a los dos millones de euros.

Sin sanciones

Explicó el presidente que la Federación española de fútbol está dispuesta a aceptar el aplazamiento sin sanciones de las posibles deudas de los clubes con los futbolistas generada por el periodo de inactividad por el Covid-19, garantizando la totalidad del salario de los jugadores, siempre previa negociación con sindicatos.