Primer partido postderbi en el campo de O Couto para la UD Ourense, que lo primero que busca es recuperar la senda de las victorias como local, que implicaría volver a ganar, algo que se resiste desde la visita del Paiosaco en la vigésima jornada, el 19 de enero. Enfrente, un Alondras muy mejorado desde la llegada de Jorge Otero al banquillo. El partido arranca a las cinco.
Cuatro empates en los cinco últimos partidos han frenado la marcha rojilla, que sin embargo no camina lejos de la cuarta plaza, cinco puntos por delante la tiene. Sumando, sumando, de uno en uno pero sumando, los ourensanos no se han ido, con mucho camino todavía por delante. Da motivos para el optimismo que ni Barco ni Fabril, por ejemplo, andan bien. Más bien lo contrario, la dinámica es horrorosa, tres derrotas y dos empates de los coruñeses en el último mes largo de competición, un triunfo sólo los valdeorreses. Claro que los herculinos vienen de ganar, el martes en la jornada que estaba pendiente desde diciembre; los barquenses lo que vienen es de estamparse frente al colista.
La jornada 26 ha arrancado bien para la UD Ourense, la victoria en los minutos de prolongación del Arosa en el campo del Arzúa consolidad a los pontevedreses en la tercera plaza pero mantiene amarrados a los coruñeses, a los que encimarán los rojillos si ganan (se pondrán dos puntos por detrás).
Bajas y una alta
Faltará Gabi Sanín por sanción y Rubén Durán y Iago Blanco por lesión en una alineación que todo apunta no diferirá demasiado de la de la última salida a Espiñedo. Podrá volver Viti, baja en Carballiño por estar suspendido. Enfrente, Pardavila y Alex no estarán en O Couto por motivos físicos, a los que se une Martín por decisión del entrenador.
"Hay partidos que tienen mayor importancia que otros y éste es uno de ellos porque nos permitiría dar un salto importante en la tabla", relató desde Cangas Otero, al frente de un Alondras que conquistó la victoria en la última salida, 0-1 en Vigo sobre el Rápido de Bouzas. Estaba ya en el banquillo pontevedrés en la segunda derrota más abultada como visitante en lo que va de liga, un 5-0 en el campo del Bergantiños. Pero la trayectoria es ascendente, hace poco más de un mes coqueteaba con los puestos de descenso, un triunfo en Ourense no le descartaría para pelear la cuarta posición. Porque todo apunta que ésa es la que va a quedar vacante, con un buen número de aspirantes a conquistarla. Experiencia a la hora de apretar en la recta final tienen de sobra los rojiblancos, que a estas alturas del curso pasado, aun estando mejor que ahora, tampoco parecían el mejor candidato para acabar en el play off. Y acabaron.
Solidez defensiva, que implica mantener la puerta a cero, y aprovechar los espacios. Ésa es la receta del banquillo pontevedrés, que obviamente sabe que también deberá atacar. "No debemos tener tanto miedo cuando nos hagamos con la pelota", remarcó Otero.
La victoria es muy necesaria para una UD Ourense que una semana más tarde intentará lo que nadie ha conseguido hasta la fecha, puntuar en Santiago. Después llegará el último derbi del curso, el Barco, en O Couto, para visitar seguidamente al Bergantiños, recibir al Fabril, jugar en Vigo contra el Bouzas y terminar en casa contra el Polvorín. La teoría dice que en este trecho del calendario se jugarán los rojillos sus opciones de pelear la cuarta plaza.
