El Palencia acabó con la felicidad en Ourense, volvió a dejar claro que es un mal rival. No fue hasta el último cuarto cuando encontró las rendijas de la victoria, ayudado por un paso más en la rotación, algo decisivo en partidos igualados. Cierran los castellanos el sexteto que lidera la tabla con tres triunfos, ya ninguno lleva el cartelito de 'no he perdido'. Cayó el COB y cayó también el Valladolid.

El estruendoso comienzo, con dos triples consecutivos de Ott, colocó un 9-2 y prolongó un estado de felicidad que parecía iba a ser eterno. Poco a poco se equilibraron las fuerzas, en parte porque Balaban todavía se estaba calentando las manos. Un parcial de 0-5 mandó a los equipos al primer descanso con los visitantes dos puntos arriba, 17-19.

Se calentó Balaban y a él se subió el Ourense, para que le llevase a caballito contra Larsen y contra Jorgensen. El serbio, que acabó con 26 puntos y 10 rebotes, dominaba en la zona, tanto que anotaba a veces al segundo o incluso tercer intento. Pero Palencia seguía por delante, hasta que un triple más adicional de Wood igualó el marcador, 33-33. Una cesta posterior del 12 del COB colocó el 37-35 con el que unos y otros enfilaron el descanso.

Anotaba mucho Balaban pero no era el día de Edu Martínez ni de Alvarado, que no sumó hasta el tercer cuarto. A los arreones de uno respondía el otro, con mayor esfuerzo los ourensanos, claramente inferiores en la pelea por el rebote, 22 contra 36. Una canasta de tres del base canario ponía el 55-53, que era un 57-55 a falta del periodo final.

El demarraje definitivo de los visitantes llegó en los últimos minutos -entraron seis arriba, 65-71, a los tres últimos-. Balaban seguía picando piedra, pero, mala noticia, apareció Dani Rodríguez para jugarse tres ataques consecutivos cuando la bola quemaba. Un palmeo de Van Wijk mantuvo con vida a los ourensanos, 70-75.

Los lanzamientos de tres puntos, esos que en Oviedo entraban uno tras otro, no acabaron en la cesta cuando al menos uno habría puesto a Palencia contra las cuerdas. Lo lanzó Alvarado, con la suerte que una falta en la pelea por el rebote propició una segunda oportunidad. Tiró Edu Martínez, pero tampoco. Sí acertó Travis, 70-78 ya entrando en el último minuto. La respuesta intentó darla Wood, pero se lió y ni siquiera llegó a tirar. Una canasta más adicional de Larsen acabó con el sueño de acostarse en el liderato. Alicante, el viernes, espera a los de Gonzalo García.

"Ha habido dos partes muy diferentes, en la primera sobre todo hemos defendido bien; en la segunda, sus situaciones de bloque directo nos han matado, no hemos sabido defenderlo. En la pretemporada nos ganaron metiéndonos 17 triples pero aquí lo han hecho jugando un dos contra dos, tenemos que aprender porque no hemos sido capaces de encontrar soluciones", remarcó Gonzalo García en la rueda de prensa posterior.

Aprender de la derrota

"Se ha visto que son muy buenos, son un serio candidato a pelear por el ascenso. Pero eso no nos debe conformar. Perder entra dentro del juego pero hay que aprender de cómo hemos perdido", añadió el entrenador bilbaíno del COB, que minimizó el hecho de encajar la primera derrota de la temporada. "Nos ha ganado un equipo que tiene de todo y además por parejas. Debemos seguir con los pies en el suelo pero a la vez con la ambición de seguir creciendo", finalizó García de Vitoria.