Cuarta salida de la UD Ourense, destino Cangas. Además de Arce, cada vez más cerca del final del túnel, es baja en los rojillos Hugo García, al que descarta un esguince en la rodilla y al que Currás espera tener listo para el próximo partido, la visita de la SD Compostela. Recuperado ya Iago Blanco, Presas (abductor) e Isi (espalda) renquean pero están disponibles. En los pontevedreses, Pereira recupera a Jesús Varela y a Jonás. El partido arranca a las cinco y media.
No dejan de jugar los ourensanos fuera de O Couto desde que visitaron Porriño para enfrentarse al Pontellas. Desde aquel 1-1, un empate y dos derrotas, una especialmente abultada. "Llevamos tiempo sin ganar, la alegría que dan las victorias es difícil de igualar con cualquier otro concepto del fútbol. Además que cuando no ganas, los discursos tienen que ir hacia dentro. Las victorias es lo que todos buscamos y no todos consiguen, no hay sitio para todos. Nos está costando mucho ganar, es una realidad, debemos ser conscientes de ello. Nada, mucha concentración y hacer las cosas lo más sencillo posibles. Al final esto es fútbol y todo depende de nosotros, de lo que seamos capaces de hacer", relata Currás.
Victorias y discursos
Seis partidos y sólo uno con la puerta a cero... "Los números ahí están, pero debemos ir más allá, analizar si nos están llegando con facilidad. Te pueden llegar mucho y no hacerte goles y te pueden llegar lo mínimo y marcar. Debemos encontrarnos de nuevo, volver al rigor defensivo sin perder alegría en ataque. Tenemos que arreglarlo, pero sin que limite nuestro juego ofensivo, no se trata que por taparte atrás dejes de buscar la portería contraria. Equilibrio, solidez pero sin perder la vocación de ir hacia arriba, las victorias son impagables, los discursos se compran cuando ganas", recalca el entrenador de la UD Ourense.
"Todos los partidos hemos generado situaciones para hacer gol, yo veo a estos jugadores día a día y sé de su potencial. Cuando arranquen nos van a dar mucho. No podemos perder la confianza, tenemos que seguir haciendo ocasiones, otra cosa es que meterlas no es fácil. Sí me preocuparía que dejásemos de ser generosos en el fútbol que proponemos", remarca, a la vez que añade que "el partido del domingo contra el Arenteiro sí que me fastidió, haces el 1-0 y te empatan poco después. No hicimos el mejor partido a nivel ofensivo, pero el empate fue un palo. Los diez últimos minutos de ese partido fueron los que menos me han gustado".
Cuando arranquen dice, ¿cuándo será eso? "Yo espero que mañana (por hoy), que salgamos bien de un partido que espero poco abierto, con muchas disputas. Les hemos visto (al Alondras), es un campo muy difícil, no nos van a regalar nada, nadie lo hace. Hicieron un final de temporada brutal y ésta han arrancado como nosotros, les está costando producir puntos. Cuando no sumas, la confianza no es la misma que cuando las cosas van rodadas. Todo está muy comprimido todavía", subraya.
"Vamos a salir a por los puntos, lo que te dan las victorias, lo que te da ganar, no te lo da nada", acaba.
Atasco en la clasificación
En la acera rojiblanca, el espejo del último partido en casa, un 4-1 sobre el Bouzas, es el espejo en el que se miran los pontevedreses. Unos y otros, decimocuarto y decimoquinto, están a menos de un triunfo del séptimo clasificado, hasta diez equipos están metidos en dos puntos, trece en tres. Ganar supondrá un alivio grande.
