El Celta está sopesando incorporar un medio centro este verano. No se trata de una prioridad -el principal objetivo es la contratación de un futbolista de ataque-, pero la dirección deportiva ha decidido sondear sin prisa opciones de mercado en busca de un centrocampista que pueda encajar en sus planes para mejorar el plantel que Fran Escribá va a tener a su disposición antes de que la actual ventana de fichajes eche el cierre el próximo 2 de septiembre.

En este estudio de mercado, el club vigués se ha interesado por la situación de dos jugadores, ambos con contrato en vigor con sus respectivos equipos. Se trata del valenciano del Betis Víctor Camarasa, de 25 años, que el pasado curso jugó a préstamo en la Premier League con el Cardiff, y del centrocampista guineano del West Ham United Pedro Obiang, jugador formado en la cantera del Atlético de Madrid que ha desarrollado la mayor parte de su carrera en el Sampdoria italiano.

Víctor Camarasa ya fue objetivo de la dirección deportiva celeste hace un par de años cuando militaba en el Deportivo Alavés que apeó (con gran actuación del valenciano por cierto) al Celta de las semifinales de la Copa del Rey. Medio centro de corte ofensivo, ha regresado a la disciplina del Betis tras el descenso a la Championship del Cardiff, donde jugó cedido con bastantes buenas prestaciones (32 partidos, 5 goles y 4 asistencias). Su fichaje presenta no pocas complicaciones, pues tiene contrato en vigor con el Betis (que parece incluirlo en sus planes) y una cláusula de rescisión de 25 millones de euros.

Pedro Obiang ha militado en las tres últimas temporadas en el West Ham United con cierto protagonismo, a pesar de que dos lesiones de cierta entidad (una de tobillo y otra de rodilla) le restaron minutos. A sus 27 años, el internacional guineano cuenta con una vasta experiencia en las grandes ligas europeas: 99 partidos en la Serie A con el Sampdoria y 91 en la Premier League, además de participaciones en las copas de Italia e Inglaterra y una breve experiencia en la UEFA Europa League. Su posición en el campo es la de medio centro de corte ofensivo, aunque también puede desempeñarse como pivote. Tiene contrato en vigor hasta 2022.

La llegada de cualquiera de estos dos jugadores (son solo dos de las opciones que se manejan) estaría supeditada a la salida de alguno de los mediocentros del equipo. Fran Escribá se propone manejar el próximo curso un plantel de un máximo de 23 futbolistas contando con los tres porteros y se antoja improbable que el Celta arranque el curso con cinco mediocentros. Lobotka (si no llega una gran oferta) y Okay son intocables y tampoco parece que Fran Beltrán, por quien el Celta pagó el pasado curso 8,5 millones, pueda salir, con lo que Jozabed parece el candidato con más probabilidades de marcharse, si finalmente se aborda el fichaje de otro centrocampista.

Por ahora, el Celta se centra principalmente en la Operación Salida. Antes de concertar cualquier nueva contratación, el club concentra sus esfuerzos en encontrar un nuevo destino a Emre Mor, Claudio Beauvue, Robert Mazan y Facundo Roncaglia.