Las negociaciones entre el Celta y el Valencia para el intercambio de Maxi Gómez por Santi Mina más una cantidad económica a determinar para el club de Balaídos continúan abiertas, aunque los dirigentes de ambos equipos se han enzarzado en las últimas horas en un cruce de declaraciones con la intención de elevar la cotización de sus jugadores. A las palabras del lunes en Mos de Carlos Mouriño, presidente céltico, subrayando que "no vamos a regalar a Maxi", replicaba horas más tarde su homólogo valencianista con que sus futbolistas "valen hoy mucho dinero". Anil Murthy incluso llega a cuestionar el fichaje del atacante uruguayo del Celta: "Hay que ver si es el punta idóneo". A pesar de estas manifestaciones para reivindicar a cada uno de los delanteros que protagonizarían el trueque entre Celta y Valencia, en Vigo siguen considerando viable la operación retorno de Mina, aunque admiten que las negociaciones son de maduración lenta, que podrían prolongarse más allá de lo deseado quizás por ambas partes.

La reacción de Murthy, ante la invitación de Mouriño a que los pretendientes de Maxi Gómez se fijen en los 50 millones de euros que estipula la cláusula de rescisión del contrato del uruguayo, fue la de poner en valor a la plantilla de Marcelino García Toral. "Hay que pararse a mirar los números porque muchos jugadores quieren venir al Valencia. Eso ha cambiado. Cuando Mateu [Alemany] y yo llegamos el primer año era casi imposible fichar. Si Mina sale, hay que ver si Maxi es el punta idóneo para ocupar el sitio en el equipo. Hay que ver números porque igual la combinación es que salga Rodrigo. No se van a fichar más de cuatro delanteros. Todos los jugadores del Valencia valen hoy mucho dinero", dijo Murthy durante la entrevista concedida al programa "90 minuts" de CV Radio.

Aunque Santi Mina haya dado el visto bueno al Celta para su regreso a casa, después de considerar que la etapa de cuatro años en Valencia está agotada y que necesita buscar otro destino donde le concedan más minutos de juego que los ofrecidos el curso pasado por Marcelino García Toral, el presidente valencianista valora la aportación del delantero vigués. "Este equipo es campeón de España y Mina es parte importante de la plantilla. Lleva aquí mucho tiempo, ha jugado Champions, es un jugador clave. Nuestros futbolistas valen mucho dinero", insiste en sus apreciaciones sobre la plantilla del conjunto de Mestalla.

En la estrategia de defensa de sus intereses, el empresario singapurense incluso llega a dudar de la marcha de Rodrigo Moreno, a quien en Valencia ya dan por perdido. El excéltico considera concluida su etapa en Mestalla, donde el curso pasado se le criticó por su escasez de goles. De hecho, Marcelino incluso ha llegado a valorar en público la incorporación de Maxi Gómez. Ahora, sin embargo, Murthy extiende dudas sobre el futuro del atacante hispano-brasileño: "Es un gran futbolista. ¿Si va a salir? Hay que ver los números, las condiciones. No hay ningún pacto con nadie, pero si hay una muy buena oferta sería casi irresponsable oponerse. No sólo hay que estudiar la oferta, si no quién va a venir a hacer los goles si se va Rodrigo. Si no hay un jugador que reemplace a quien se pueda ir, no habrá traspaso".

A pesar de que en Valencia se apunte sobre las posibles llegadas de tres futbolistas relacionados con el Celta, como son Maxi Gómez y los barcelonistas Rafinha Alcántara o Denis Suárez, así como la de su compañero en el Barcelona Cillessen, el dirigente del club valenciano rebaja las expectativas de una afición eufórica tras disfrutar con el título de la Copa del Rey y la clasificación para la Liga de Campeones: "No creo que haya demasiados cambios en la plantilla", sostiene Murthy.

El lunes, Carlos Mouriño reclamaba desde Mos el derecho a poder "negociar de igual a igual" con el Valencia, "no con alguien que se cree superior".

Apuntadas las posiciones de ambos presidentes en una negociación en la que las diferencias económicas que separan a ambos clubes se cifran en unos 10 millones de euros, las estrechar relaciones entre el Valencia y el Celta facilitarán posiblemente el acuerdo para que este verano se cierre la operación de intercambio entre Maxi Gómez y Santi Mina. El uruguayo jugaría en Mestalla y el vigués volvería a hacerlo en Balaídos, después de que Mouriño y Murthy recordasen la alta cotización de ambos delanteros. Es negociación es de maduración lenta.