Después de muchas temporadas en la élite, de haber peleado el título de liga incluso, el Cidade de As Burgas vivió la pasada la amargura del descenso. Sólo dejó el equipo Figo, en tanto llegaron a la plantilla Aroa, Uxía y María, procedentes del filial. Al frente, Manolo Codeso por undécima campaña consecutiva. Una segunda posición en el grupo 1 le dio billete para jugar la fase de ascenso, contra el Concordia barcelonés, primero del 2. El día 1 en Ourense y el 8 en Cataluña se dilucidará qué equipo da el salto.

"¿Cómo estoy? Mejor que nunca. Estamos en una eliminatoria por el ascenso y eso es algo que motiva a cualquiera", remarca Codeso.

A todo recién descendido se le exige el ascenso lo más rápido posible. Y ahí están... "Pero obligación no tenemos ninguna, la intención es volver a Primera división en dos o tres años, si subimos ahora habremos recogido los frutos demasiado pronto. La Primera división es ahora una categoría muy profesionalizada, y no olvidemos que en un par de años se nos fueron Nespereira, Peque, Iria, Vanessa... El subcampeonato fue un gran éxito para el club, pero pagamos las consecuencias, las jugadoras se revalorizaron y se nos fue el ochenta por ciento de la plantilla. Viene ahora una generación nueva que va a dar que hablar, y quizá para ella esta categoría en la que estamos es la adecuada".

¿Entonces? "Entonces que tenemos una ilusión enorme, que no renunciamos a nada. Simplemente los plazos se han acortado, cuanto antes volvamos a Primera, mejor", subraya el entrenador franjiverde.

Me habla de una generación que viene, ¿quién la lidera? "Yo diría que María Arias, Clara y Ana, la portera. El año pasado lo pasamos muy mal, pierdes y pierdes... El descenso fue a priori un paso atrás, pero al final ha sido bueno para las jugadoras, para el club, para mí. Pelear por no bajar agota mucho".

"Los equipos se han profesionalizado muchísimo, nosotros no hemos podido dar ese paso, somos un club de base, de cantera. Vamos a seguir dando guerra", admite.

Porque aquí se sigue con la máxima de no pagar por jugar... "No, aunque hemos conseguido un pequeño sueldo para las más veteranas, para que si vienen a por ellas tengan que pagarlas mucho más. ¿Románticos? Sí, aunque cada vez es más difícil, me gustaría tener dinero no para fichar, simplemente para retener a las jugadoras. Porque aunque eso se diga, de aquí no se han ido para ganar títulos", apunta.

Más de una década

Once temporadas al frente del equipo, justo la mitad que Wenger en el Arsenal, ejemplo de longevidad en un banquillo. ¿Se debe ir preparando? "Todavía no, pero todo se andará. A veces te da rabia, ves lo que cobran otros entrenadores, lo profesionales que son. Muchas veces me gustaría ser como ellos. Pero lo que hago me llena, pienso seguir muchos más años", remacha Codeso.