"Con los 61 puntos que tenemos ahora no tenemos ninguna opción, tenemos que ganar en Carballiño y esperar que no lo haga el Alondras. Con uno no nos llega y posiblemente nos adelantaría el Ourense CF, así que tenemos que ganar los tres y seguro que al menos seremos quintos". Con las cuentas claras espera el CD Barco la última jornada de liga, mañana, desde las seis. Manolo Pérez, el entrenador valdeorrés, no quiere saber nada de pinganillos. "Por no llevar no llevo ni reloj a los partidos, me centro en el juego. Es lo que tienen estas situaciones de final de temporada, pero desde luego que el resto de resultados no van a condicionar el planteamiento", adelanta.

El Alondras depende de sí mismo, el resto tiene que esperar el pinchazo de los pontevedreses. "Está claro que tiene una pequeña ventaja, otra cosa es que jugar en Carballo es una salida complicada", relata el entrenador del Barco, que no podrá contar contra el Arenteiro ni con Omar ni con Juanito Bazo, en ambos casos por sanción.

¿Pagaría porque en vez de una jornada quedasen tres? "Uf, es algo que no me he planteado. Desde hace un mes sabíamos que teníamos que ganar los cuatro últimos partidos, no lo hemos cumplido pero llegamos al final con opciones y eso es algo que debemos explotar. El equipo llega bien a la recta definitiva, en un buen momento, contra el Choco hicimos un partido muy completo", remarca Pérez.

"El balance de la primera vuelta fue sobresaliente, 37 puntos son muchos. Luego, entre enero y febrero encadenamos diez partidos sin ganar, seis empates y cuatro derrotas. Con haber cambiado dos empates por victorias... Lo superamos, a través del juego y luego llegaron los resultados. En este tramo final hemos ido de menos a más", concluye Perez.

El Ourense CF de Fran Justo llega como un disparo, ocho victorias consecutivas, la última en el campo del Paiosaco con un gol en el minuto 92. Reciben en O Couto al Compostela los blanquinegros, que necesitan dos pinchazos ajenos. "Toda la energía la tenemos que gastar en derrotar al Compostela, un muy buen rival. Lo demás no está en nuestras manos".

"La sensación es que las cosas están saliendo, que por diferentes motivos están para ti. Pero eso no quita que tenemos el inconveniente de competir contra dos rivales que van por delante. Un resbalón, un penalti, una expulsión puede tirar por la borda todas las cuentas", añade el entrenador ourensano, que una vez más completará la convocatoria con juveniles. "Acabar tan bien habla muy bien de todos", remacha Justo.