La liga ofrece una segunda oportunidad. O una quinta quizá. Hace una semana, la UD Ourense afrontaba la visita al Boiro distanciado en tres puntos del cuarto clasificado, con un par de equipos por el medio. Como ahora antes de jugar en Carballiño. Por el camino, una victoria en Barraña y una derrota en casa contra el Choco, como derrotas sufrieron los pontevedreses el fin de semana, el Barco o el Alondras el miércoles en esta semana de tres partidos. Vuelve Rubén Durán, cae Hugo García. No llegan ni Fran ni Fondevila. En el Arenteiro, todos disponibles después de un partido en Ferrol en el que Gelucho reservó a piezas importantes con la intención de tenerlas a tope contra los rojillos. El partido, a las cinco y media.

"Es un derbi, con todos los ingredientes que tiene este tipo de partidos, los futbolistas se conocen entre ellos, los aficionados también. Los dos necesitamos los tres puntos, ellos para estar más cerca de la permanencia, nosotros para seguir en la pelea y devolvernos esa confianza y esas sensaciones que no acabamos de recuperar. Vamos a por los tres puntos, claro, pero tenemos que hacer méritos para conseguirlos. Todos nosotros le hemos dado mil vueltas a qué es lo que podemos mejorar. Vamos a salir a competir al máximo, es nuestra obligación", relata Fernando Currás, el entrenador.

A tres puntos continúa estando la cuarta plaza... "Es que parece que sólo perdemos nosotros, llevamos así mucho tiempo. Sabemos que este último tramo de la temporada no tiene nada que ver con cómo estábamos haciendo las cosas, pero cada uno lo ve desde su prisma. Miras a los demás y dices, 'pero si todos estamos igual'. Tengo la sensación que en nuestro caso se magnifican las derrotas. Eso no quita que no seamos conscientes que no estamos en el mejor momento, pero estamos ante otro partido que nos dice que si lo hacemos bien va a cambiar la perspectiva. Está en nuestras manos y tenemos que aprovecharlo, el campo siempre te da otra oportunidad", subraya Currás, que remarca: "Tenemos que demostrar que queremos estar en la pelea hasta el final".

"Con el paso de los días vas viendo las cosas de otra manera, va aumentando la energía positiva. Cuando acabó el partido del miércoles, las sensaciones que tienes son malas, te dices 'así no'. Luego van pasando las horas y te das cuenta que ahí sigues, que no estás fuera de la batalla. Esas energías hay que canalizarlas para que sean positivas, aun sabiendo que no vamos sobrados. Pero ninguno lo va. Brío y amor propio", recalca.

"Perdido no está nada, a veces nos expresamos con demasiada transparencia cuando la realidad dices que estamos todos igual. Es eso, el Choco venía de perder en casa, Alondras y Barco perdieron el miércoles como nosotros, ahora se ha sumado el Ourense CF, el Arosa no se ha ido... No estamos bien, pero no hace mucho sabíamos perfectamente cuál era el camino para competir. Si no hemos quedado fuera es porque tampoco los demás andan muy sobrados", refiere Currás, que añade que "esperamos un partido diferente al del miércoles, más de duelos individuales en el que vamos a necesitar lo mejor de cada uno de nosotros".

El rival

Espera un Arenteiro muy diferente al Choco. "El Choco no te disimula un mal día, pero ese partido ya pasó. Al Arenteiro es difícil hacerle daño, en casa están sacando los partidos. No te someten tanto con el balón, pero tienen mucho empuje, son intensos, verticales. Estamos preparados", finaliza.