Últimos metros de juego en la Tercera división, la competición entra en las cuatro últimas jornadas. En una semana de tres partidos, el campo de O Couto acoge el UD Ourense-Choco, dos de los candidatos a una plaza en el play off de ascenso. Los ourensanos salieron felices de Boiro, los pontevedreses fueron atropellados por el Racing de Ferrol. Sextos llegan al partido los de Currás, un puesto por detrás los de Gonzalo Fernández, dos puntos de margen entre ellos. En los locales vuelve Josu una vez cumplido un partido de sanción pero por idéntico motivo queda fuera Rubén Durán, a la vez que no llegan ni Fran ni Fondevila. Todo, desde las cinco y media.

La victoria en Boiro supuso esa energía que parecía haberse perdido. También en el entrenador, que habla como cuando jugaba, como cuando se comía el campo. "Ya dijimos antes del partido que había que ganar, aun así ves que el equipo va al límite. Pero no hay tiempo, jugamos mañana (por hoy) y luego otra vez el domingo. Esperemos que ese triunfo haya venido bien para llegar a donde no llegamos con otras cosas. Tenemos la confianza en jugar bien y en ganar, los buenos resultados son los que hacen que parezcamos más altos y más guapos. Jugamos en casa, con nuestra gente, se acerca el final, no hay margen para nada... En fin, a tope sin mirar atrás, con ganas".

El Choco rompió el sábado con un estruendoso 0-5 contra el Ferrol una racha espectacular de partidos sin perder. Currás ni se inmuta. "Hay que fijarse contra qué equipo perdieron, el Racing ya se ha puesto en modo Racing. El Choco es muy buen equipo, un desafío más para nosotros. Lo que más me gusta es que siempre son ellos mismos, tienen un perfil muy definido. Manejan bien el mercado de Vigo y alrededores, tienen ese perfil Celta. Sobresalen en el juego entre líneas, saben conquistar los espacios siempre a través del balón. Si están cómodos son difíciles de sujetar, es un equipo que te exige mucho. Vamos a tener que minimizar todo lo que podamos sus virtudes".

Currás no pierde el tiempo en soñar con un partido determinado, ni siquiera se imagina un 4-0 a los diez minutos. "¡Pero si nosotros no hemos vivido ni un partido tranquilo! Lo que me imagino es que seamos un equipo solidario que esté acertado ante el gol. Es verdad que no llegamos mucho, a ver si somos capaces de generar más fútbol de ataque. Y me imagino sintiendo la conexión con la gente, que seamos capaces de engancharlos porque los necesitamos más que nunca. Todos los puntos que hemos sacado ha sido sufriendo, llevamos 55, vamos a por los 58. Ver como se han conseguido nos hace sentir bien, nos da energía".

La chispa

¿Llega su equipo con chispa a los cuatro últimos partidos, ve que llegan a los balones divididos? "A estas alturas de la temporada pesan las piernas, pesa la cabeza, pesa el entrenador... Tengo la sensación que no hemos tenido un descanso intencionado, nosotros seguimos sprintando, si bajamos las revoluciones no somos nosotros", finaliza Currás.