El centrocampista de la Unión Deportiva Ourense Rubén Durán recibía en los prolegómenos del partido contra el Céltiga celebrado el pasado domingo en el campo de O Couto una placa en reconocimiento a su contribución al crecimiento del proyecto en los 100 partidos que ha disputado. El futbolista, de 35 años, llegaba en el verano de 2016 tras cerrar su etapa profesional en Marbella y, confiesa, no esperaba seguir en activo tres años después ni que todo saliera tan rodado desde la Primera Regional, pasando por la Preferente, hasta tocar la Tercera División.

"No contaba con llegar a los 100 partidos, la verdad -afirmaba ayer-. Vine con la idea de echar una mano, para ayudar a crecer al club y ahora mismo estamos en una situación que poca gente contaba, después de cuatro ascensos en cuatro años". Subraya Rubén Durán también los méritos acumulados en la presente temporada en Tercera División, donde un recién llegado como la UD Ourense se está codeando con clubes históricos del fútbol gallego: "Hay que darle el valor que tiene a estar clasificados donde estamos. Sabemos que será una segunda vuelta complicada, pero creo que tenemos equipo y fuerzas para aguantar ahí".

Su partido 102 con la UD Ourense, resuelto con un empate sin goles contra el Céltiga, no será recordado, aunque el centrocampista entiende que merecieron mejor suerte: "El equipo hizo buen partido. Tuvo el control en todo momento, con el 80% de posesión. Ellos solo se defendían y buscaban algún balón parado. Es complicado jugar contra un equipo que solo viene a defenderse, porque corta el ritmo y parece que te contagias. Nos costó hacer ocasiones, pero si hubiera entrado una se habrían abierto y hubiera sido más vistoso".

Rubén Durán entiende además que no se puede despreciar ningún punto en una competición en la que está tan caro ganar: "Es un punto más, ya se ve que a todos los equipos les cuesta puntuar y hay que valorar ese punto y tratar de hacerlo bueno el domingo que viene contra el Alondras".

Los dos entrenadores coincidían al final del partido en lamentar la incidencia que tuvo en el partido el mal estado del terreno de juego y el '10' de la UD Ourense reconoce, desde dentro, que el césped no ayuda al que tiene que llevar la iniciativa: "Lleva así de mal todo el año. El campo no ayuda en nada, el otro día estaba seco e irregular y, en la circulación, cuando intentas darle velocidad al juego, al final tienes que jugar a dos toques y le das tiempo al contrario a que se coloque".

Fue una semana complicada en cuanto a la disponibilidad de efectivos, al coincidir varias bajas por sanción y lesión con otros jugadores que no estaban en plenitud de condiciones por diferentes contratiempos físicos. Rubén Durán evita esa excusa y destaca que la plantilla de la UD Ourense tiene profundidad para afrontar las dificultades. "No son excusas -asegura el jugador, que tuvo una semana complicada debido a un proceso febril-. Si no me viera bien para jugar, hay otros compañeros que podían entrar. Al correr y sudar, no lo notas. Está claro que va a haber sanciones y lesiones, para eso están las plantillas. Cualquiera que entra compite, y si puede quedarse en el once, se queda. Y más en la dinámica en que estamos, de buenos resultados y buenos partidos. Así es más fácil cuando entras que te salga mejor y que tengas más posibilidades de repetir".