El Celta ha cerrado la plantilla que peleará por la permanencia en la máxima categoría con la incorporación del franco-argelino Ryad Boudebouz, un centrocampista zurdo que en unos días cumplirá 29 años y que llega a préstamo a Balaídos con una opción de compra tras contar con pocos minutos de juego en los últimos meses en el Betis de Quique Setién. Boudebouz se convierte en el tercer refuerzo céltico (todos ellos zurdos) en este mercado de invierno. El central holandés Wesley Hoedt (Southampton) abrió el camino y le siguió el lateral uruguayo Lucas Olaza (Boca Juniors). En esta ventana de fichajes de enero han abandonado la plantilla céltica Júnior Alonso (Boca Juniors), Mazan (Venezia) y Roncaglia (Valencia). A estos se ha unido Dennis Eckert, del filial pero que también jugó con el primer equipo, y que se marcha a préstamo al Excelsior Rotterdam. El club vigués no ha podido concretar las salidas de Hjulsager, Emre Mor, Cabral o Radoja, como era su deseo para aligerar un plantel que afrontará la segunda parte del campeonato con 24 futbolistas, aunque Radoja no cuenta para el club y Mor continúa apartado del equipo por indisciplina.

Aunque el Celta buscaba un delantero que pudiese jugar en varias posiciones, finalmente se decantó por un centrocampista de perfil atacante que puede moverse como interior por ambos costados e incluso como mediapunta. La dirección deportiva celeste contaba con amplios informes del franco-argelino, pues en el verano de 2016 fue candidato a reforzar la plantilla que entonces dirigía Berizzo. La estrella del Montpellier entonces esperó un año más para dar el salto a la Liga española. El Betis pagó alrededor de 7 millones de euros más uno en bonus por hacerse con el 80 por ciento de los derechos económicos del jugador, que dejó Francia con 11 goles y 9 asistencias en esa temporada.

El futbolista, internacional con Argelia en 25 ocasiones, estará cedido en Vigo hasta junio y el Celta se reserva una opción de compra que medios sevillanos apuntaban ayer que ronda los 8 millones de euros, aunque el club bético se conformaría con recuperar parte de lo invertido hace año y medio por un jugador que ha ido de más a menos en el Benito Villamarín.

Boudebouz había ido perdiendo la confianza de Setién, que en este curso apenas lo ha utilizado. Ha disputado 12 partidos (9 de Liga) en lo que va de temporada, sin aportar goles ni asistencias. En lo que va de 2019 solo ha disputado 11 minutos. Los cinco últimos fueron ante el Real Madrid, el 13 de enero pasado. No ha marcado ni contabiliza ninguna asistencia.

En esta ocasión, el Celta no esperó a las últimas horas del mercado de fichajes para cerrar el tercero y último de los refuerzos que tenía previsto realizar en este mes de enero. A primera hora de la tarde se vinculó a Ryad Boudebouz con el Celta, que horas después hizo oficial la incorporación de otro futbolista zurdo, que se une a una nómina en la que aparecen Aspas, Brais Méndez, Juncá, Wesley Hoedt y Lucas Olaza.

Boudebouz, que no será presentado posiblemente hasta la próxima semana, como su compañero Olaza, pues en A Sede apuestan por centrarse en el partido de mañana ante el Sevilla (Balaídos, 20:45 horas), ocupa una posición con mucho tráfico en el vestuario céltico. El internacional argelino tendrá que competir por la titularidad con Brais Méndez, Mathias Jensen, Jozabed Sánchez, Sofiane Boufal, Pione Sisto y Andrew Hjulsager.

Durante esta ventana de fichajes, Boudebouz despertó interés de numerosos equipos europeos, principalmente franceses. Nacido en la localidad alsaciana de Colmar el 19 de febrero de 1990, el internacional argelino fue pretendido en las últimas semanas por Girondins de Burdeos, Toulouse, Montpellier, Bastia, Sochaux e incluso Niza, entre otros. Este último club vetó su incorporación por decisión de sus accionistas chinos y estadounidenses. Así lo reconoció días atrás Jean Pierre Rivère, presidente del Niza, en el programa 'Nice-Matin': " ¿Se han abortado las llegadas de Facundo Ferreyra y de Ryad Boudebouz? Sí, hubo un veto. Es una pregunta que ha que hacérsela a ellos [los accionistas]", señaló Rivère. También el Bolonia italiano y el Bursaspor turco pensaron en él.

Después de que se frustrase la incorporación del alemán Amin Younes, del Nápoles, el Celta reactivó las negociaciones para conseguir la cesión de Sergio León, del Betis. El delantero andaluz quería marcharse al no contar para Quique Setién, que le dio una oportunidad en el partido del Copa del Rey del miércoles. Marcó un gol y se despidió entre lágrimas de la afición. Su salida hacia Vigo también se frustró. El club también negociaba con el francés Remy y el holandés Janssen, pero finalmente se decantó por Ryad Boudebouz, al que seguía desde el verano de 2016.