La Unión Deportiva Ourense disputa esta tarde en los campos del Barbadás y del Cartelle (18.30 y 19.00 horas) los antepenúltimos partidos del calendario de preparación. Quedan las visitas del fin de semana a Xinzo y Celanova para completar las pruebas y el centrocampista Germán Pérez ve al equipo "por el buen camino".
"No es como otras experiencias que tuve -añade-, en las que el 90% del equipo era nuevo. Al seguir un bloque, ya solo a nivel de grupo es más fácil de llevar. Además, la gente que vino es muy buena tanto a nivel humano como futbolístico. Nos queda esta semana para acabar de rodarnos y para estar todos a punto y disponibles, porque hubo contratiempos, golpes, pinchazos, como el caso de Luis o de Fondevila que además se acumularon en el mediocampo".
La tradicional visita al campo de Os Carrís, enmarcada en los actos de celebración del 20 aniversario de la fundación del Barbadás, le trae buenos recuerdos a Germán. "Es un clásico del día 15. Iremos a reencontrarnos con viejos amigos y un partido más de cargar de pilas". Hace un año que dio el salto, dejando la Tercera para irse a Preferente, y asegura que no se arrepiente. "Ahora es ventajista decirlo, pero aún sin haber ascendido no me hubiese arrepentido. Opté por irme porque el proyecto de la UD Ourense me aportaba ilusión y era ambicioso. Juegas para ganar en la categoría que sea, y eso siempre aporta cosas. El desenlace fue el mejor de los posibles y este año trataremos de recoger los frutos, seguir compitiendo y a ver que da de sí", explica el mediocentro.
Tirando de perspectiva, Germán entiende que hay señas de identidad de la UD Ourense a las que dar continuidad en Tercera. "Seguramente el equipo será muy parecido al de las últimas jornadas -señala-. Ese es el camino. Hay que seguir apostando por ser un equipo competitivo, que nunca le pierde la cara al partido y que crece en base a no encajar. Y a ver hasta dónde llega la gasolina y las dinámicas. Al ser la Tercera una liga tan complicada, la clave estará en adaptarnos rápido al nuevo ritmo que te exige la categoría, pero no creo que haya grandes revoluciones".
El centrocampista de la UD Ourense también tiene claro, a mediados de agosto, qué fragilidades deben corregirse para evitar que el desembarco en Tercera sea accidentado. "Tenemos que quedarnos con la imagen de final de temporada, la de encajar poco y la de ser un equipo fiable, porque si no encajas vas a rentabilizar mucho las ocasiones que puedas tener. También es importante que no nos vuelva a pasar como al principio de la pasada temporada, en la que tuvimos desconexiones entre fases buenas en los partidos". Eso nos penalizaba. Hay que ser un equipo competitivo del minuto cero al noventa", recomienda.
