Hace un año la Unión Deportiva Ourense presentaba en el estadio de O Couto a dos titulares. Venían de la primera categoría provincial, como el equipo, y esgrimían las ganas de progresar como arma para convencer al entrenador entre refuerzos de categoría superior. Dicho y hecho. El defensa José Miguel Rodríguez Codeso (Celanova; 1988) y el centrocampista ofensivo Jonatan Magisano González, Joni, (Carballeda de Avia, 1993) han logrado el título de campeones de liga en Preferente y el ascenso a Tercera División, están en la final de la Copa Diputación y disputaron 36 de las 38 jornadas (2.927 y 2.474 minutos, respectivamente). De ilusión también se vive en el fútbol.
Joni, además, ha sido el máximo realizador de los unionistas con 14 tantos en liga, solo uno menos que los que contabilizó con el Ribeiro en la Primera Galicia. "Dar el salto da más ganas de competir todavía. Venimos a pelear por un puesto", recalcaba en su tarjeta de presentación ante el presidente, Modesto García, el entrenador, Fernando Currás, y la prensa. Doce meses después, la promesa está cumplida y el reto superado con honores.
"La verdad es que no contaba con tener ese rol porque con el nivel que hay es complicado. Coincidió en las últimas jornadas meter esos goles decisivos", explica Joni sobre sus providenciales ocho tantos en la segunda parte de la liga (Beluso, 2; Bande, Nogueira, Gondomar, 2; Moaña y Sanxenxo). No oculta sin embargo que cree sinceramente en sus posibilidades: "Confío en mí y, como ya he dicho otras veces, sé que siempre puedo dar más". También reconoce que antes del prodigioso adelantamiento del tramo final lo pasaron mal: "Sabíamos que nadie nos iba a regalar nada y que no se puede estar al mismo nivel siempre. Se tienen bajones, porque es difícil mantener un nivel alto todo el año. Eso nos complicó la vida, pero el resultado al final fue el que queríamos". Asegura no obstante que nunca dejó de creer en el final feliz para la temporada. Y tiene testigos: "Cuando estábamos séptimos, íbamos de camino a un partido a Balaídos con un amigo que es preparador físico del Ribeiro hablando de que se podía ganar la liga y lograr el ascenso. Confiaba bastante en el equipo".
La seguridad defensiva y los goles de Joni en situaciones límite como las de Bande, Nogueira o Moaña contribuyeron a que no fallara el augurio: "Acabamos la temporada muy bien defensivamente. Los de atrás estuvieron muy seguros".
Joni también valora haberse ganado el cariño de una afición que no es fácil: "Era el primer año fuera, en un club importante, y se agradece que tengan confianza en uno". El desgaste es notorio y reconoce que se han ganado un descanso físico y mental que no acaba de llegar: "Llevamos dos semanas más o menos de relax después de conseguir el ascenso, pero ya hay ganas de descansar y sobre todo de desconectar para disfrutar de lo que hicimos".
Les queda la cita de mañana en Monforte contra el Polvorín, con el título de campeón de la Preferente que seduce poco en la plantilla, y la final de la Copa Diputación del día 17 en O Couto contra el Velle, donde se centra todo el interés.
