La Unión Deportiva Ourense tiene ante sí la primera de las grandes tardes que le quedan por delante en su camino hacia Tercera División. Mañana a las 18.00 horas, los unionistas reciben en el estadio de O Couto al Mondariz como líderes con tres puntos de ventaja sobre el tercero cuando quedan 12 en juego. Ganar ayudará a que la cuenta atrás sea una aliada. Dos de los jugadores que más sonrisas y cicatrices acumulan en el plantel ourensanista, el centrocampista Rubén Durán y el lateral derecho Josu, destacan la dificultad del reto que enfrentan, pero tienen depositadas muchas esperanzas en la dinámica que impulsa al equipo. Son dos grandes batalladores a los que la posibilidad de un ascenso les pone en guardia y les afila el instinto.
Ambos coinciden al elevar a la categoría de final el partido de mañana. "Ya va acabando la temporada, estamos en una situación con muchos equipos parejos tanto por arriba como por abajo y todo el mundo se juega cosas. El equipo llega en una buena dinámica, sobre todo de resultados, y está claro que el Mondariz va a venir a ponérnoslo complicado y nosotros tenemos que seguir haciéndonos fuertes en casa, sumando de tres en tres. Con todo lo que llevamos pasado, ahora que dependemos de nosotros y está tan cerca hay que apretar un poco más y ganar", expone Durán en el plan de asalto.
"El equipo está con mucha ilusión -añade Josu-. Obviamente, es la primera vez en toda la temporada que estamos líderes en solitario y no queremos bajarnos de ahí. Sabemos que va a ser un rival difícil, porque le está ganando o complicando la vida a todos los equipos de arriba, y tenemos que salir muy mentalizados como en el partido contra el Moaña. Quedan cuatro finales, tenemos que echar el resto, estamos todos y estamos en el mejor momento de la temporada".
La última victoria en Moaña alimentó la confianza y el optimismo, reconoce Rubén Durán: "Fue una alegría que ya nos merecíamos, ganando un partido en esas circunstancias, porque llevábamos algunos puntos perdidos en esos últimos minutos. En la forma en que se dio, con toda la gente animando hasta el último momento, hizo que sepa mejor y, sobre todo, viendo los resultados que se dieron en otros campos, hizo que el equipo se alegrase mucho más".
Para Josu fue "un subidón" el triunfo que significó el liderato con el gol de Joni en la prolongación: "Hacía tiempo que no me alegraba tanto por ganar un partido. Era un rival directo, fuera de casa, en el último minuto. Es de las sensaciones más bonitas del fútbol, pero quiero que no se vuelva a repetir y que podamos ganar con un resultado más holgado y, si puede ser, antes. Es bastante estresante", bromea.
Rubén Durán también asume que no tendrán tregua muy hasta el fina. Si consiguen el objetivo, asegura que será incluso más meritorio: "Ya había escuchado hablar de la igualdad que había en Preferente, aunque no contaba con que tantos equipos estuvieran luchando por esas dos plazas. La UD Ourense está compitiendo bien todo el año, con algún altibajo, pero esa igualdad de la liga hace que sea mucho más atractiva y, si al final conseguimos el ascenso, tendrá mucho más mérito".
La remontada
A esta favorable situación se ha llegado no sin mucho sufrimiento, remontando desde la séptima a la primera posición en ocho jornadas. Para Josu, la fiabilidad explica el adelantamiento. "La clave está en no haber encajado. La diferencia entre la primera y la segunda vuelta, creo que todo el mundo lo ve, es la seguridad defensiva. No es que antes fuéramos un desastre, pero quizá el equipo estaba menos compacto. Nos vino bien la llegada de Vieytes, que aportó empaque, y el equipo está mucho más junto. Si el rival no te mete gol, es mucho más fácil ganar. Además tenemos la suerte de que ahora Joni está con "flow" y nos está dando puntos muy importantes", explica el defensa.
En el plano emotivo, Josu reconoce el aliciente de contar con una afición al lado. "Me impresionó ver cómo estaba el Couto el día del Bande. Yo siempre dije que el fútbol no sería el deporte rey si no fuera por la afición que mueve y el Ourense mueve bastante. No tenemos nada que envidiarle a otros clubes". El lateral considera que poco tienen que pedirle para este tramo final tras la exhibición de Moaña: "Están cumpliendo de maravilla desde el principio. Nos apoyaron en los momentos más difíciles y, ahora que el equipo va bien, la afición está ilusionada y esperemos no defraudarles. Vamos a poner todo de nuestra parte, no tengo ninguna duda. Quedan cuatro finales y esto es un juego en el que puedes ganar o perder, pero si por lo menos le pones las mismas ganas que el rival, se puede conseguir el ascenso".
Durán entiende que hacer pronósticos sirve de poco. "Ahora mismo los que mejor están son la UD Ourense y el Porriño, pero todos los equipos se juegan mucho y en cualquier campo te puedes dejar puntos. La distancia es tan corta que el favorito parecía el Estradense y mira donde está ahora. En cuatro partidos que quedan puede cambiar mucho la clasificación, aunque espero que seamos nosotros. El otro me da igual", asegura un veterano al que, como Josu, a quien ilusiona como a nadie ascender en casa, le brillan los ojos por la proximidad de un día D.
