La vocación formativa ha llevado a tres jóvenes entrenadores ourensanos Miño arriba. Iván Alonso, Jandro Novoa y Marcos Bello han sido contratados por el Club Deportivo Lugo para trabajar esta temporada en su cantera. Tras la experiencia con el Ribeiro, en un episodio histórico para el equipo de Ribadavia con el ascenso a Preferente y la clasificación para las semifinales de la Copa Diputación, Iván Alonso (Ourense, 16-6-1992) admite que le gusta trabajar con la base. Lo ha podido hacer en el Pabellón, hasta que surgió la posibilidad de marcharse a Lugo.

"Fue a última hora -explica sobre esa puerta abierta-. Adrián Laureda (el coordinador de la cantera del Lugo) me comentó que había una opción para entrenar en el fútbol 11 porque se iba a hacer una reestructuración de la cantera y no me lo pensé". En el Ángel Carro gustaba la pasión que vuelca en el fútbol Iván Alonso y tras "un par de reuniones" se llegó al acuerdo. "Yo quedé muy contento y él parece que también", apunta sobre su paso a la profesionalización.

A Iván Alonso le han encomendado el cadete B, que juega en Liga Gallega y, a mayores, tendrá el alevín A, en cuanto se ponga en marcha el fútbol 8. "Empezamos el lunes a entrenar. Por ahora estamos de mudanza y viendo como trabajan el juvenil A y el B", explica sobre sus primeros días en la ciudad de la Muralla. "Estoy muy contento de lo que veo en los entrenamientos y hay bastantes campos", añade sobre las condiciones de trabajo que ponen a disposición de los entrenadores de la base.

Las metas de la nueva etapa que se le abre tienen dos vertientes, explica. "El objetivo que tiene el club es crear un grupo de trabajo en el que todos los entrenadores tengan la misma idea y el mismo método de trabajo". Así podrán conocer al detalle a cada jugador a medida que vaya escalando en el organigrama.

"El objetivo individual -agrega- es conocer el club, aprender mucho y aprovechar el año. Es una ciudad nueva, puedo dedicarle todo el tiempo al fútbol y quiero exprimir la experiencia al máximo en todos los sentidos".

A final de temporada se daría por satisfecho con que el concepto haya enraizado en el futbolista: "Hay que fijarse en el tema del aprendizaje, que cojan los objetivos marcados". Formar y formarse, puntualiza: "Quiero seguir aprendiendo y con toda la gente nueva que tengo alrededor podré aprender muchísimo".

A Iván Alonso le parece "llamativo" que hayan fichado a tres entrenadores de Ourense para la cantera rojiblanca. "Se ha hecho una reconstrucción y se quedaron pocos de los entrenadores que había. Buscaban un perfil joven, que tuviera ganas de aprender y de adaptarse a la idea del coordinador. Los tres somos del mismo perfil y con la ambición de seguir creciendo", indica. Por el momento, no piensa en volver al banquillo de los mayores: "Siempre compatibilicé las dos cosas y, sinceramente, a nivel de aprendizaje y de calidad de entrenamiento, los niños son más agradecidos. Si quieres más nivel de competición y de exigencia, tienes que apostar por el fútbol sénior".

Marcos Bello (Barbantes, 24-6-1990) también sale hacia Lugo desde el Pabellón, aunque en su caso empujado por motivos personales. En los últimos cinco años ha estado ligado a la Fundación Celta, así como al A Peroxa, Maside y Barbantes. En Lugo dirigirá el alevín B y será el segundo del cadete A.