Advertía el entrenador del Carnes do Ribeiro que los partidos se iban a resolver por detalles, previsiblemente por la mínima, y que el mérito estaría en competirlos. Atinó David Taboada, Piri, en su pronóstico, aunque quizás no se esperaba que en los dos primeros asaltos de la fase de ascenso a Primera Nacional saliese cruz.

El conjunto de Ribadavia empataba en la jornada inaugural ante el Rocasa canario y ayer perdía por un tanto (17-16) ante el Claret de Gijón, desaprovechando un contraataque en los instantes finales para establecer la igualada. Con los asturianos ya inalcanzables en la clasificación al sumar dos victorias, el equipo ourensano tratará de completar otro partido edificante en la despedida del torneo, prevista para las 12.30 horas en O Consello contra el Alcobendas. Los madrileños superaron a los canarios (32-24), pero podría ser insuficiente para impedir el ascenso del Claret, que en el partido que arranca a las 10.30 aspira al triplete.

El técnico del Carnes do Ribeiro lamentó el percance que les dejó sin su mejor hombre, Celso. "Se lesionó a los 12 o 13 minutos y, si a eso le unimos el portero de empaque que tenían ellos, todo se complica. Pero el equipo defendió a muerte, que era lo que se pedía, y los chavales llegaron hasta donde pudieron". Piri agradeció el reconocimiento del público "puesto en pie" y recalcó que hoy tratarán de despedir una histórica fase de ascenso "compitiendo dignamente" y con minutos para todos.