- ¿La grada de O Espiñedo siguió fiel desde que se desinflaron las expectativas?

- La afición anima como la que más. Esta afición es muy buena. Nunca te silban y siempre van con el jugador a muerte. Evidentemente, quieren que gane su equipo, pero nunca hubo problemas a pesar de estar tanto tiempo sin ganar. Siempre nos animaron. El día del Villalonga le pudimos ganar al líder y se enganchó más gente.

- ¿Para el interés de la competición ha sido perjudicial la escapada del Villalonga?

- Había más nivel el año pasado, mejores jugadores, pero no deja de ser una liga súper competitiva. No le ganas holgadamente a nadie, como se vio el domingo con el Monterrey. Ellos tenían 12 puntos y nosotros casi 40. Deberíamos ganar por más goles, pero no pasa eso. El Villalonga tiene buen equipo pero no lo veo tan superior como para ir tan sobrado en la clasificación. Me gustaron más el Estradense o el Céltiga, que tienen muy buenos equipos y no se dan enganchado. Por lo que he visto en estos dos años, la Preferente es una liga difícil.

- Les queda la Copa Diputación, con unos cuartos de final duros ante el Allariz.

- Este año cae un poco tarde. Todo el mundo dice que es complicado repetir. El año pasado la ganamos y este, si estamos ahí, es para volver a ganarla si se puede. Ojalá podamos llegar a la final y ganarla por la afición, que se lo merece, porque estamos encantados con ella.