La Unión Deportiva Ourense afronta hoy su segundo intento de ganar a domicilio en la visita al campo de A Carabina de Loñoá (17.30 horas). Fracasó en el primero, un partido condicionado por la superficie del terreno de juego del Arnoia, y tras la reparadora goleada sobre el Palmés en O Couto, los de Antonio Dacosta vuelven a intentarlo ante un anfitrión que no suele ser amable con las visitas.
No ha sido una semana fácil para el técnico unionista, pero el viernes dirigió el entrenamiento y esta tarde estará con el equipo en el asalto a los tres primeros puntos foráneos. Su probable once contará con Samuel en la portería y una línea defensiva intocable desde que comenzó la liga, con Julio Álvarez, Tito Currás, Xurxo y Lucas Nieto.
Valderas y Diego Soto se ocuparán de barajar en el centro del campo y el esquema recupera la mediapunta con la entrada de Roberto Dacosta, ausente por sanción y motivos laborales en los dos primeros encuentros de liga. Xaco y Cristian atacarán por los flancos y Julio Salgado será la referencia ofensiva, con el reto de repetir el gol que marcó en el mismo escenario el pasado 28 de diciembre y que valió una clasificación para la tercera ronda de la Copa Diputación.
Para el banquillo quedan Otero, el portero Héctor, Brais, Jorge y otro que se estrena, el centrocampista Iago Garrido. La lista de ausencias vuelve a ser amplia por tercera semana consecutiva. El delantero Bryan no jugará en Loñoá por precaución debido a una molestia muscular y Julio Martínez tampoco está disponible por culpa de un proceso febril.
Las buenas noticias llegan con el final de la puesta a punto de Fran Álvarez o Sergio Pérez, que en dos semanas tendrá el alta y podrá aparcar las muletas. El delantero Adrián Rodríguez se está ejercitando individualmente con buenas sensaciones y Roberto Almeida entrará, quizás ya para el siguiente partido en O Couto contra el Santa Teresita, tras dejar atrás una latosa molestia lumbar.
El once y las alternativas para robustecerlo se están consolidando a medida que se acaba el verano. El impulso final llegará con las victorias. La UD Ourense quiere verse arriba desde las primeras jornadas, aunque en Arnoia los unionistas ya pudieron comprobar que no hay desplazamientos regalados. Para ganar tendrán que mandar en casa ajena.
