El Ourense busca un leve consuelo para sus males con una victoria en su penúltima aparición en O Couto. A los de Luisito les hará falta todo su poder de abstracción y un gran esfuerzo al final de una semana consagrada a la reivindicación por los impagos para doblegar a la Cultural Leonesa, que se presenta con el objetivo de cerrar las cuentas de la permanencia.

Al conjunto rojillo se le resiste desde hace cinco jornadas el triunfo del resarcimiento. El último mes ha sido letal para la aspiración de mantenerse en la lucha por la promoción hasta los últimos peldaños ligueros. También se ha esfumado el billete para la Copa del Rey y el retroceso incluso está poniendo en riesgo la clasificación entre los diez primeros. Quedan tres oportunidades para salvar esa frontera a pesar de todas las adversidades.

La semana tampoco ha dado tregua en la enfermería. El centrocampista Adrián Cruz está ingresado en un centro hospitalario debido a una infección vírica. A cambio, Luisito recupera a Borja Valle tras cumplir sanción y a Álex Fernández, que ha superado una contractura muscular. Para recambios le quedan cinco futbolistas que ayer jugaron con el filial en Pontevedra. Aarón, Pablo Corzo, Dani, Iago y Rubén Arce fueron titulares y decisivos en la victoria y alguno hará doblete en la segunda parte.

La defensa volverá a ser de circunstancias, con futbolistas reciclados y otros que no están en óptimas condiciones físicas. Adil entrará en la medular para acompañar a Yebra y el plan de ataque se sostendrá sobre los habituales, con la alternativa para la posición más avanzada entre Óscar Martínez y Gustavo Souto. Los jugadores del Ourense estuvieron respaldados en el entrenamiento de ayer por un grupo de aficionados, con los que Óscar Martínez, Yebra y Portela hicieron un aparte al acabar para agradecerles su apoyo.

La Cultural ha descrito una curva inversa a la del Ourense en el campeonato, aunque la recuperación no ha tenido suficiente impulso para dar el salto a la mitad superior de la tabla. Los de Luis Cembranos han perdido dos partidos menos que los rojillos, pero los 13 empates les penalizan. Suman ininterrumpidamente desde hace seis jornadas y así han cimentado su permanencia tras el bache inicial, pero el presidente del club, Felipe Llamazares, no quiere relajación mientras haya puntos en juego y esta semana acusó públicamente al equipo de estar "de fiesta" y poco centrado en la visita a O Couto. Esta tarde saldrá de dudas, aunque el anfitrión le lleva clara ventaja, para su desgracia.