El central del Ourense Daniel Portela se perderá el partido del domingo en Alcalá salvo recuperación prodigiosa. El zaguero no pudo ejercitarse ayer en O Couto debido a la inflamación que presentaba su tobillo izquierdo y el entrenador de los rojillos, Luisito, considera improbable su inclusión en la convocatoria. En ese caso, Portela se quedará al margen tras nueve jornadas en el once, su mejor racha de continuidad en dos años y medio.

Luisito es poco optimista sobre el concurso de su defensa en Alcalá: "Casi seguro que no va a poder estar. Tiene el tobillo muy inflamado y en ese campo hay que estar al cien por cien y él no lo está. Si el sábado lo estuviera iría en la convocatoria, pero tiene el 90 % de posibilidades de no viajar porque además están los dos centrales con cuatro amarillas. No podemos arriesgar tanto porque todavía faltan 27 puntos por disputar".

El jugador mantiene alguna esperanza, sobre todo si remiten las molestias: "El miércoles entrené como mucho dolor. La verdad es que lo tengo algo inflamado y por precaución reservamos. A ver si a medida que llega el fin de semana me encuentro mejor o a ver qué medidas podemos tomar, pero tengo dolor y habrá que esperar".

Portela reconoce que le pasó factura forzar la articulación, pero confía en hacerse una prueba antes de la decisión final: "A ver si baja la inflamación y por lo menos me deja correr para probarme. Aparte es un partido bastante importante y no me lo querría perder, pero si tengo que verme en la situación de descansar, lo tendré que hacer".

El zaguero vio desde la barrera el entrenamiento en el que Luisito optó por Alberto Campillo para reconstruir la retaguardia. El vigués prefirió no adelantar acontecimientos sobre su reaparición en el once, aunque aseguró que está listo tras ocho semanas en la suplencia: "No se sabe cómo va a responder Portela, que creo que está a la espera de pruebas, pero somos un equipo en el que estamos todos preparados para jugar en el once y, si hay la posibilidad de jugar, daré lo máximo de mí".

Campillo confesó que fue doloroso perder el rol de la titularidad tras la derrota en el Cerro del Espino: "Es un palo grande quedarse fuera del once, pero la profesionalidad hay que demostrarla con constancia en el trabajo y los que no están jugando son los que más responden en los entrenamientos y eso es para sentirse orgulloso".

El central estará más alerta si cabe por la importancia de los puntos: "Es un rival que tiene que ganar sí o sí para mantener la categoría y nosotros no tenemos nada garantizado y vamos a dar el 100% para sacar los tres puntos. Están contra las cuerdas, en las últimas diez jornadas de liga los equipos aprietan mucho más y nosotros tenemos que ser uno de ellos porque no estamos salvados. Van a salir a por el partido y eso nos abre una puerta para jugar nuestro fútbol y crear ocasiones para ganar".