Piragüismo | Campeonato de Europa

Pablo Graña: «Lo único que me queda son unos Juegos, quiero intentarlo»

El canoísta cangués acaba de conseguir en Racice su primer oro absoluto a nivel individual

El canoísta cangués Pablo Graña celebra su medalla de oro en Racice.

El canoísta cangués Pablo Graña celebra su medalla de oro en Racice. / RFEP

Cangas

El canoísta cangués Pablo Graña sigue engordando su palmarés internacional. Este fin de semana consiguió una medalla de oro en el Campeonato de Europa celebrado en la localidad checa de Racice. Un oro que le sabe especialmente bien porque es el primero a nivel individual en categoría absoluta. «Había estado cerca en otras ocasiones y ya tengo varias platas y un bronce, así que estoy muy contento», contaba ayer desde Pontevedra, donde entrena dentro de la estructura del Centro de Tecnificación Deportiva. El joven pone ahora su punto de mira en el próximo mundial, que se disputará en Milán. Pero sin perder de vista el sueño de todo deportista: «Los Juegos Olímpicos es casi lo único que me queda, es un reto que me gustaría intentar».

El palista del Real Club Náutico Rodeira cuenta en su currículum con un oro en C2-200 y dos en C4-500 en sendos mundiales, otro oro en C2-200 mixto en unos Juegos Europeos y finalmente uno más en C2-200 en un Campeonato de Europa. Pero a nivel individual siempre se había quedado a las puertas. Hasta este fin de semana. «Salí muy bien y en los primeros metros conseguí unos metros de ventaja sobre mis rivales. Luego me mantuve, pero es cierto que los últimos 50 metros se me hicieron un poco cuesta arriba», cuenta Graña. Su principal rival fue el polaco Oleksii Koliadych, que llegó a alcanzarle prácticamente sobre la línea de meta. Tanto es así que la diferencia entre ambos fue mínima: Pablo Graña hizo un tiempo de 38,291 segundos y Koliadych 38,338 segundos. Y en tercer lugar entró el ucranio Andri Rybachok, también el mismo segundo: 38,544. «Es una distancia que me gusta, que se me da bien y sabía que iba a estar delante», señala.

Pablo Graña con su medalla de oro en el podio de Racice rodeado del polaco Oleksii Koliadych (izq.) y el ucranio Andri Rybachok (dcha.).

Pablo Graña con su medalla de oro en el podio de Racice rodeado del polaco Oleksii Koliadych (izq.) y el ucranio Andri Rybachok (dcha.). / RFEP

Este oro en el Campeonato de Europa no le garantiza la clasificación para el mundial que se disputará del 22 al 24 de agosto en Milán. Por ello su objetivo más inmediato es preparar el selectivo que se disputará en las próximas semanas en Verducido para conseguir ese billete mundialista.

La temporada pasada la concluyó con una plata en el Campeonato del Mundo disputado en Samarkanda (Uzbekistán), un subcampeonato para aliviar de alguna manera la tristeza de no haber conseguido la clasificación para los Juegos Olímpicos de París junto a Noel Domínguez en el C2-500. Un sueño por el que seguirá luchando, especialmente a partir del próximo año y con un compañero aún por determinar. «Creo que es una distancia que se me da bien, pero necesito trabajar más para ganar resistencia en los últimos metros», explica el canoísta.

En el caso de España hay una dificultad añadida, con un nivel y una competencia tremenda entre varios barcos separados por muy poco tiempo. «Hay mucho nivel, pero creo que es posible clasificarse. La posibilidad de estar en unos Juegos Olímpicos es casi el único reto que me queda y quiero seguir intentándolo», concluye el flamante campeón de Europa en C1 200.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents