Un golpetazo para alejar el descenso

«El valor de los puntos ante el Polvorín y de lo que estamos haciendo es tremendo», asegura un orgulloso Gonzalo Fernández cuando analiza la trayectoria del Alondras tanto en el último encuentro del domingo como en lo que va de temporada. Razones no le faltan al preparador de Oia, que tiene al conjunto cangués en la zona intermedia de la tabla clasificatoria, noveno con 19 puntos en su casillero, con 10 de ventaja sobre las posiciones de descenso. O lo que es lo mismo, en una zona más que tranquila para una escuadra a la que le ha tocado lidiar este año con una auténtica plaga de lesiones.

Los dos últimos en caer han sido Ube y Diego. El primero de ellos sufre una rotura fibrilar que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego entre cuatro y seis semanas. El segundo sufrió una lesión el pie tras golpear a un balón. Aunque se ha descartado cualquier tipo de afectación ósea, parece complicado que pueda jugar este viernes ante el Betanzos. Con Yelco, Salgueiro, Xián y Freire en el dique seco al menos hasta el próximo año, Gonzalo Fernández se queda con únicamente 15 futbolistas sanos de la primera plantilla para competir en los siguientes compromisos de los suyos, Betanzos, UD Ourense y Atlético Arteixo.

La única buena noticia en este capítulo fue la reaparición de Guille, que ya actuó como titular ante el filial del Lugo, permitiendo al preparador alondrista contar con una defensa más ortodoxa. Eso sí, solo durante 19 minutos, que son los que tardó Diego en abandonar el campo, obligando a Roi Tato a retrasar nuevamente su posición para moverse en la línea de retaguardia.

«Creo que la victoria tiene muchísimo mérito porque ante un equipo que tiene en el ritmo una de sus mejores cualidades, haberlos aguantado 90 minutos y teniendo que agotar dos cambios en el primer tiempo es para reconocerlo», reflexiona en voz alta el entrenador del conjunto rojiblanco. Y es que la situación dejó al Alondras con una única ventana para poder hacer los tres cambios de los que disponía. «En el primer tiempo conseguimos los dos goles, pero teníamos claro que, como se dieron las cosas, lo íbamos a acusar en la segunda mitad. Estuvimos incómodos, es cierto, pero luego los últimos cambios nos ayudaron a dar el último empujón y a conseguir la victoria», resume. Un triunfo que llegó con un gol de Fran López, al que le estaba costando ver portería. «Para un delantero marcar, y encima el tanto de la victoria. Es muy importante y le ayudará a seguir trabajando», dice.

En cuanto a los 19 puntos que ya lucen en el casillero de su equipo, Gonzalo Fernández afirma que «es una animalada lo que estamos haciendo, con un tremendo desgaste en lo físico y en lo mental. En cuanto parecía que recuperábamos a la gente, en un mes pierdes a cuatro futbolistas». Esos problemas de lesiones han supuesto que los que están sanos deban realizar un sobreesfuerzo de adaptación, y ahí el mejor ejemplo es el de Roi Tato, fichado para actuar en el frente de ataque y lateral por necesidad. «Dentro del mismo partido ha jugado en 70 posiciones», manifiesta Gonza. «Otro equipo lo estaría pasando mucho peor, pero estamos en la zona tranquila y a menos de dos partidos del playoff. Le doy mucho valor», sentencia.

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