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Balonmano | Primera Nacional
Miguel Pousa Jugador del Automanía Luceros

“Desde el minuto 1 pensé en trabajar para volver, pasase el tiempo que pasase”

El lateral cangués reapareció ante el OAR Coruña después de un año en el dique seco

Miguel Pousa, ayer en el pabellón de O Gatañal. | // GONZALO NÚÑEZ

La exultante juventud de la plantilla del Automanía Luceros en la presente temporada lo convierte en un inusitado veterano con los apenas 23 años que marca su DNI. Pero ese supuesto liderazgo que le toca asumir únicamente había podido desarrollarlo desde el banquillo, a la espera de la oportunidad de regresar a las pistas tras la rotura del ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda sufrida la pasada temporada. Ese momento llegó este fin de semana ante el OAR Coruña. Miguel Pousa volvió a sentirse jugador tras algo más de un año en el dique seco.

Cayó lesionado en el entrenamiento del 12 de noviembre del año pasado y unas semanas después se confirmó el peor de los diagnósticos. Fue operado en enero de este año y tras un intenso trabajo de recuperación Miguel Pousa ya ha vuelto al Luceros.

– Por fin se acabó la pesadilla.

– Sí, ahora solo queda ir poco a poco. No vale la pena apurar más de lo debido, sino ir con precaución para evitar recaídas.

– ¿Qué sintió cuando Adrián Méndez lo llamó para salir a pista?

– Buff... Al principio pensé que prefería debutar en casa [risas], pero siempre hay que estar dispuesto a ayudar al equipo. Cuando me lo dijo ya iba a salir sin calentar ni nada. Luego sentí alivio, aunque reconozco que cierto fastidio porque fuese en un partido de fuera. Con lo que te quedas es con la satisfacción por el trabajo que estuve haciendo, porque ha sido un año muy duro.

Miguel Pousa con varios jugadores de las categorías inferiores del Balonmán Cangas. GONZALO NUÑEZ

– La idea inicial era no arriesgar y esperar a enero. ¿Por qué se cambió ese pensamiento?

– Bueno, creo que fue porque este fin de semana no nos salía nada a ninguno y había que buscar una solución diferente. La idea era que ya podía haber jugado contra el Granitos Ibéricos, pero fue un partido muy reñido y no se dio. Yo estoy contento por volver.

– En este largo año de recuperación, ¿qué se le pasa a uno por la cabeza?

– Cuando me lesioné yo ya sabía que había algo roto, aunque al principio me decían que no. El traumatólogo y la resonancia ya confirmaron la rotura del cruzado. En el momento es un bajonazo, pero desde el minuto 1 ya pensé en trabajar para volver a jugar, pasase el tiempo que pasase. Es un proceso largo, solitario, no es tan llevadero como si estuvieses con el grupo... Pero también tiene su parte positiva, porque ves cosas que desde la pista son más difíciles de ver.

– ¿Le permitió coger perspectiva sobre el equipo?

– Sí, el año pasado con la lesión de Pérez todos bajamos un poco la cabeza y con la mía también. Te quedas tocado porque no puedes ayudar y porque ves que las cosas que haces en los entrenamientos no salen en los partidos.

"Al salir a la pista sentí alivio, pero también fastidio por no volver en un partido de casa

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– ¿No llegó a pensar en ningún momento en la retirada?

– No, nunca lo dije, pero sí pensaba que sería complicado. Yo no soy capaz de ver los partidos desde la grada, sin poder jugar [risas].

– Con 23 años le toca hacer de veterano en este equipo.

– No podemos tener veteranos con 23 años [risas]. Es un rol difícil, porque a estas edades no lo tienes interiorizado. Con la lesión de Camiña [tiene 26] nos toca a Sergio y a mí, que somos los mayores, animar un poco, o a gente que lleva tiempo como Javi Fernández. Pero la clave es ayudar entre todos porque somos un equipo muy joven

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“Me gustaría jugar arriba algún día, aunque solo fuese un partido”

– ¿Cuál es la clave de la gran temporada del Luceros?

– El mérito es de todos, pero especialmente de Adrián Méndez, que lleva un par de temporadas con los juveniles y ya conocen el modelo de juego. Apostamos por el contragolpe, contragol, por las transiciones, y si no podemos, se ataca posicional.

– ¿Le queda la espina de poder debutar algún día con el primer equipo?

– La verdad es que me gustaría, aunque solo fuese en un partido, el típico ante el Barcelona que te hace creer que puedes tener hueco. Ahora debo ir poco a poco, pero creo que si se trabaja puede haber premio.

– El ejemplo más actual es el de Manu Pérez.

Él está acostumbrado a hacer lo mismo en Asobal, Primera Nacional o juveniles. Se toma en serio al cien por cien todos los entrenamientos y eso le ayuda a estar al mismo nivel. Se lo tiene bien merecido y ojalá siga aprovechando sus oportunidades.

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