Comenzar desde el primer día a sentar las bases de una buena segunda vuelta y de una temporada que también podría ser histórica. Con esa mentalidad regresó ayer de sus vacaciones el Frigoríficos del Morrazo, de la mano de José Juan Durán, que dirigió el entrenamiento de ayer y hará lo propio con el de hoy por la ausencia de Nacho Moyano, que refuerza el equipo técnico de Jordi Ribera con la selección española sénior.
Además del preparador madrileño también faltó en esta primera jornada de trabajo en O Gatañal el lateral argentino Lucas Aizen, concentrado con su selección de cara al Torneo Centro-Sur que se disputará a finales de mes, y que dirimirá seis plazas para disputar el Campeonato del Mundo de 2023, a celebrar conjuntamente en Polonia y Suecia. El resto de efectivos de la primera plantilla canguesa estuvieron presentes en el pabellón cangués para la primera toma de contacto tras un parón vacacional de tres semanas.
El equipo al completo fue sometido a un test de antígenos a fin de descartar la presencia de algún positivo por Covid-19 en un momento en el que la enfermedad está en un punto álgido. El miércoles los jugadores ya habían superado una primera prueba, ayer volvieron a hacerlo, y el lunes repetirán, porque todas las precauciones son pocas. Eso sí, antes de pisar el terreno de juego de O Gatañal tuvieron que pasar otro test, y no era otro que el de la báscula, al pesarse para comprobar si las fiestas navideñas no habían causado estragos y todo el mundo se mantenía dentro de los márgenes permitidos por el equipo técnico de la entidad.
Ya a continuación tocó una sesión orientada a ir adquiriendo las sensaciones perdidas durante el parón. Trabajo de superioridades para ir soltando el brazo, bombardeo a los porteros, y la inevitable carga física con Dani Malvido. “Han sido tres semanas de vacaciones muy merecidas. Se han ganado el derecho a desconectar del día a día”, señala José Juan Durán, que apunta que únicamente ha habido una semana de descanso puro, ya que las dos últimas la plantilla se llevó un plan aeróbico y de fuerza para mantener un cierto nivel de trabajo. “Parar por completo tanto tiempo habría sido complicado. Ahora tenemos una pretemporada por delante y hay tiempo hasta el día 5 de febrero”, asegura el ayudante de Nacho Moyano.
El conjunto cangués regresa al trabajo con las únicas ausencias de Moyano y Aizen
Hoy habrá una nueva sesión preparatoria que girará en torno a acciones defensivas individuales. “Se trata de ir cogiendo nuevamente las distancias, los contactos, el trabajo del uno contra uno...”, además de la evidente práctica de una de las mayores suertes del balonmano, el lanzamiento. El equipo cangués tendrá descanso mañana para volver al tajo el lunes, ya con Nacho Moyano reincorporado a la disciplina de la entidad. A partir de ahí se pondrá en marcha una planificación que alternará el trabajo puramente físico con las cuestiones técnico-tácticas, todo ello orientado a la mejora individual y colectiva de un equipo que quiere seguir brillando en la segunda vuelta de la competición.
Pero además de las sesiones preparatorias el Cangas tiene ya planificados cuatro encuentros amistosos, todos ellos ante rivales de cierta entidad. La mejor noticia para la afición canguesa es que todos ellos se celebrarán en el pabellón de O Gatañal. el primero será ya el próximo viernes ante el Aguas Santas luso, en el que militan dos jugadores con pasado morracense como son los laterales Rubén Ribeiro y Miguel Baptista.
Aguas Santas, Sporting, Torrelavega y Oporto serán los rivales de pretemporada
El siguiente fin de semana habrá una exigente doble cita. El viernes 21 el equipo que visitará O Gatañal será el Sporting de Lisboa de los españoles Ruesga, Natán Suárez, Gassama y Folqués, mientras que el sábado lo hará el Torrelavega, ya con su nueva incorporación, el galo Leo Renaud-David. El último compromiso de este periplo está previsto para el viernes 28, con el Oporto luso como rival.
