“Defensivamente estamos entre los cinco o seis mejores equipos de la categoría. Es en ataque donde tenemos mucho margen de mejora”
Esa es la reflexión en voz alta que Nacho Moyano realizó al término de la pasada temporada y que era toda una declaración de intenciones del técnico de Frigoríficos del Morrazo para el mercado de fichajes que estaba por venir.
Meses después puede decirse que el preparador madrileño ha sido fiel a su idea y que las cuatro incorporaciones realizadas obedecen a esa necesidad de reforzar la parcela ofensiva.
De este modo han llegado el lateral derecho Lucas Aizen (Puerto Sagunto), el central Nacho Salgado (Ikasa), el pivote Carles Asensio (Alarcos) y el extremo derecho Jenilson Monteiro (Artística de Avanca), cuatro jugadores llamados a aportar talento ofensivo y, sobre todo, goles. Con Aizen y Monteiro el Cangas fortalece el lado derecho, uno de sus puntos débiles la pasada campaña, mientras que Asensio aterriza en O Gatañal para mostrar sus cualidades en los seis metros y para completar una posición de pivote con tres hombres de diferente perfil. Y Salgado, a pesar de ser una apuesta a medio y largo plazo, cuenta con unas características antropométricas y de juego diferentes a las de un central más tradicional como Rubén Soliño.
Las dudas pueden llegar en el otro lado de la pista. En paralelo a la potenciación de la parcela ofensiva, la defensiva se ha visto mermada de forma importante. La retirada de Cerqueira deja al Cangas sin un líder y un jugador de inigualable lectura táctica, pero también se caen otros dos elementos que han sido fundamentales en determinados momentos, como son Rubén Ribeiro (en la posición de avanzado, principalmente) y Baptista. Habrá mayor responsabilidad para los Martín, Quintas y Santi López, pero también exigencia desde el primer día para que los nuevos asuman rol en retaguardia.
Con todo, el éxito de esta temporada para el Frigoríficos ha sido el haber mantenido un buen bloque y a a algunos de sus jugadores más codiciados. El ejemplo más paradigmático es el de sus dos máximos realizadores la pasada temporada, David Iglesias y Dani Fernández, pero también a otros como Alberto Martín. Con la solvencia de Javi Díaz bajo palos garantizada y la aportación de hombres de club como Quintas, Menduiña o Rubén, las esperanzas también están depositadas en la eclosión de algunos de los jóvenes valores a los que se ha estado alimentado en los últimos tiempos, caso de Brais y Gayo, de quienes se espera den un paso adelante en su rendimiento.
La otra novedad llegará en los banquillos. Nacho Moyano dispondrá de un entrenador ayudante, una labor casi tan importante durante la semana como en los partidos, donde el técnico agradecía una segunda opinión. El encargado de esta función es José Juan Estévez, “Jota”. Dani Malvido se centrará únicamente en la preparación física del equipo.
