El Frigoríficos del Morrazo abandona momentáneamente el descenso después de un trabajado triunfo ante el Anaitasuna (21-20) que alimenta sus esperanzas de salvación en una jornada en la que su rival directo, el Guadalajara, perdió ante el Incarlopsa Cuenca. Los cangueses superaron un día complicado que podía dar con sus huesos en la División de Honor Plata si todo se torcía y encaran con optimismo el choque del próximo sábado, precisamente ante el conjunto alcarreño en una auténtica final.

El equipo que dirige Nacho Moyano fundamentó su victoria en un excelente trabajo defensivo, aderezado por la actuación estelar de Javi Díaz en los minutos finales, y por la inestimable colaboración de sus aficionados. Y es que fue a base de garra y trabajo como pudo superar los nervios iniciales, con muchos errores en el lanzamiento. La igualdad era la tónica (3-2, 4-5) y no fue hasta una exclusión visitante cuando los de O Morrazo se pusieron dos arriba (8-6, minuto 21). El Anaitasuna ajustó su defensa y ahogó a los locales (9-9) que sin embargo se fueron al descanso con ventaja gracias a un postrero tanto de Cerqueira (10-9).

En la reanudación del intercambio de golpes (11-11) se pasó a un instante de zozobra con la tarjeta roja a Quintas (minuto 37). Pero el Cangas aguantó, intensificando su labor defensiva y abriendo hueco cuando todo parecía en su contra (17-13, minuto 46). Luego administró con criterio su renta hasta entrar en los minutos decisivos. El Cangas dispuso de varios ataques para ponerse cuatro goles arriba y sentenciar el encuentro, pero estuvo seis minutos sin anotar. Y ahí emergió la figura de Javi Díaz, que abortó todas las intentonas visitantes hasta que el choque ya no se le podía escapar a los suyos. Ganuza y Meoki anotaron pero al Frigoríficos ya no se le escapó una victoria vital.