El Frigoríficos del Morrazo cayó 23-24 ante el Villa de Aranda y desperdicia una ocasión de oro para encarrilar su permanencia en la Liga Sacyr Asobal. La escuadra que dirige Nacho Moyano pagó sus numerosos errores en un mal encuentro en el que, a pesar de todo, dispuso de la última ocasión para empatar, en un golpe franco a falta de tres segundos ejecutado por Rubén Ribeiro pero que escupió el larguero. La fortuna daba de este modo la espalda a los cangueses, que no tuvieron un buen regreso al pabellón de O Gatañal tras dos meses de exilio por las obras en la pista.

Fue un duelo igualado, equilibrado, como corresponde a uno de esos partidos decisivos por la salvación. Sin Javi García en cancha el cuadro castellano explotó las acciones de Matheus y Nico Lópz, autores de ocho de los primeros nueve goles de los suyos. Los locales, por su parte, volvían a carecer de ritmo de juego en un ataque coral pero atascado en demasiadas ocasiones. No fue hasta las exclusiones de Martín y Matheus cuando el Cangas logró una mínima renta de dos goles (11-9), que fue incapaz de aumentar a pesar de tener hasta cuatro oportunidades para ello. Los visitantes recortaron y se fueron al descanso muy vivos (12-11).

En la segunda mitad el Cangas volvió a estirar la goma (14-12, minuto 33) pero fue un espejismo. El atasco ofensivo era cada vez mayor y el Aranda se ponía por delante (16-17, minuto 44) y encendía todas las alertas con dos tiempos muertos de Nacho Moyano de por medio (17-21, minuto 50). En 20 minutos el Frigoríficos únicamente había conseguido cinco goles, hipotecando cualquier opción de éxito.

Había que apelar a la épica, y Moyano lo hizo vaciando portería y ordenando el 7 para 6. El Cangas ajustaba el marcador (19-21, minuto 52) y explotaba las superioridades (21-22, minuto 54). Pero los errores absurdos hacían acto de aparición, dando vida a un Aranda que se quedaba sin Matheus a falta de dos minutos. Dani Fernández erró un penalti con 21-23 y los locales presionaban a toda pista. Santi recortaba, Souto devolvía los dos goles y Cerqueira hacía creer a falta de 33 segundos con tiempo de Suárez. Los visitantes hicieron pasivo y Souto era excluido a falta de tres segundos. Ribeiro asumió la responsabilidad, pero se encontró con la madera. El Cangas deberá seguir sufriendo.