Claro triunfo de la SAR en el Pabellón de Coirón en Dena ante un Asmubal Meaño muy tocado. El equipo visitante fue muy superior, con mucha intensidad defensiva y muy alegre en ataque, mientras que el Meaño no ha recuperado el tono físico tras el segundo confinamiento por COVID-19 en menos de dos meses. Agotadas física y psicológicamente por el comprimido calendario que le impuso la Federación Española, las meañesas, predestinadas ya de por sí a la lucha por evitar el descenso, ven aún más complicada su situación.

Al conjunto local nada le salió bien. De entrada perdieron a cuatro jugadoras de las que aparecían en el acta del partido ya iniciado, por lo que el técnico sólo contaba con doce. Aunque combinaban bien en ataque, fallaron multitud de lanzamientos de 6 metros, mientras que enfrente la SAR era muy efectiva, con un ataque móvil y alegre, y una defensa muy seria.

El choque arrancaba en el minuto 6 en que fuera suspendido a finales de octubre, con un 2-2 en el electrónico. Las redondelanas parecían con ganas de resolver pronto. La falta de confianza de las locales se trasladó a pérdidas de balón en la circulación, con unas jugadoras redondelanas que leían bien la anticipación para robar y matar al contragolpe.

En el arranque del segundo tiempo un gol de Fajardo alimentó la esperanza (12-19), fue lo más cerca que estuvieron las meañesas en todo el período. Los cambios de defensa ordenados por Luis Monte, optando por 4-2 y luego un 3-3 presionante, obtenían tímidos resultados que enseguida se diluían pese al aliento de las 70 personas del pabellón con sus cálidos aplausos.Al final, 22-34 para el conjunto redondelano.