El encuentro ante el Logroño ha permitido al Frigoríficos del Morrazo –a pesar de la derrota (30-25)– adquirir buenas sensaciones de cara a los tres próximos compromisos en la Liga Sacyr Asobal frente a Viveros Herol Nava, Liberbank Sinfín y Guadalajara. El conjunto cangués se ha sacudido la mala imagen ofrecida frente a Anaitasuna y Huesca y ha rearmado su moral de cara al futuro más inmediato.

“Veníamos de un bache muy fastidiado a todos los niveles, y sin hacer nada excepcional hemos conseguido competir. Solo haciendo las mismas cosas que estamos entrenando”, reflexiona el técnico de los de O Morrazo, Nacho Moyano. El preparador madrileño se mostró satisfecho del cambio experimentado por su equipo, que compitió de tú a tú durante más de 40 minutos a uno de los conjuntos de la zona alta de la tabla. “Ellos hicieron el mismo planteamiento de partido que ante otros equipos de abajo y tuvieron que cambiarlo porque no les daba frutos. Rendimos a un muy buen nivel y ahora tenemos que ajustar las dos o tres cosas que debemos corregir”, señala el preparador madrileño, especialmente contento por el hecho de no haber tirado nunca la toalla. “Con el 29-22 en otro momento nos hubiésemos dejado ir un poco, y sucedió todo lo contrario. Incluso tuvimos acciones para haberles apretado más y meterles el miedo en el cuerpo”.

Lo cierto es que el Logroño pudo decantar el choque a su favor gracias a las exclusiones. Los cangueses sufrieron seis por tres de su rival y dos casi consecutivas de Quintas en el segundo tiempo fueron decisivas para que el marcador se rompiese. “Nosotros tenemos claro que debemos tener un nivel alto de intensidad, porque si no vemos la cara de un Cangas que no queremos. Esa intensidad defensiva contagia a otras facetas del juego”, asegura, pero también añade que “la consecuencia es que al ir más duros, con mayor contacto, corres el riesgo de sufrirlas”. Y el Logroño, dice, “las supo jugar muy bien. En esta ocasión no fue problema de que nosotros atacásemos mal en inferioridad, sino que ellos jugaron bien”. El otro aspecto destacado fue la minimización de errores ofensivos, con solo 10 pérdidas de balón en todo el partido.

La conclusión evidente para Moyano es que el Cangas “puede competir a cualquiera si estamos a buen nivel”, y es por ello por lo que apuesta por “centrarnos en nosotros mismos. Los días que hemos estado bien hemos peleado los partidos, como en Logroño, Valladolid o en los choques en los que hemos puntuado. Con el Cisne no lo hicimos y perdimos. Hay que mirarse en el ombligo y hacer lo mismo que hemos hecho en Logroño”. Lo que parece claro es que el físico ya no puede ser una excusa. “Evidentemente nos gustaría estar mejor, pero ya hemos visto un buen nivel”, señala, si bien también apunta que “tengo que ver el partido de nuevo porque quizás algún jugador llegó más cansado al segundo tiempo, aunque eso entra dentro de lo normal”.

Los hermanos Escudero pitan ante el Nava

El próximo choque del Frigoríficos del Morrazo será el sábado ante el Viveros Herol Nava. El conjunto cangués recuperará el horario habitual, al no haber retransmisión televisiva, y se jugará a partir de las 18.30 horas. La Liga ya ha hecho pública la designación arbitral para este encuentro, con los hermanos Jesús y Jorge Escudero Santiuste tratando de impartir justicia. Tan solo unos días más tarde, el miércoles 2 de diciembre, el Cangas repetirá en O Gatañal, esta vez en el duelo aplazado en su momento ante el Liberbank Sinfín, que se disputará a las 20.30 horas. En este choque los árbitros serán la pareja formada por el valenciano Iniesta Castillo y el andaluz García Rodríguez.

Adrián y Vujovic regresan con los segovianos

Aún sin la posibilidad de tener un pabellón de O Gatañal lleno, uno de los atractivos adicionales del partido del próximo sábado radicará en el regreso de dos jugadores con pasado en las filas del Balonmán Cangas. Uno de ellos es el canterano Adrián Rosales, que ha superado sus problemas físicos en una de sus rodillas y ya ha disputado unos minutos en el último encuentro de los suyos. El otro es el extremo Filip Vujovic, que pasó las cuatro últimas campañas en las filas canguesas antes de dar el salto al cuadro segoviano. Ambos serán recibidos, a buen seguro, con cariño.