Si la parte deportiva parece asegurada la económica está más o menos controlada. Después de un par de temporadas en la Liga Gallega que han servido para enjugar algunas deudas arrastradas del pasado, José Manuel Lobera se muestra ilusionado y convencido de poder afrontar el reto de competir de nuevo al máximo nivel y viajar casi cada semana a Euskadi.
