El Frigoríficos del Morrazo recibe esta noche (21.30 horas, pabellón de O Gatañal, con el arbitraje de los gallegos Andrés Rosendo y Sergio Rodríguez) al Bidasoa Irún en el arranque de la que promete ser la Liga Asobal más atípica e incierta de la historia, marcada inevitablemente por la pandemia del coronavirus. Después del esperpento que supuso la suspensión de los dos primeros encuentros por la ausencia de un protocolo que continúa sin haber, de las protestas de algún equipo por la falta de seguridad mientras disputaba amistosos el pasado fin de semana, y de una discutible decisión de la Federación Española de Balonmano amparándose en la petición de una minoría de equipos, la competición comenzará por fin. Y lo hará con múltiples incógnitas a las que no escapa el Cangas y con hasta cuatro plazas de descenso directo a evitar.

El conjunto que dirige Nacho Moyano llega a este duelo después de una pretemporada satisfactoria, en la que encajó sin excesivos problemas las cuatro nuevas piezas -el central Santi López, el lateral zurdo Miguel Baptista, el extremo Dani Fernández y el pivote Alberto Martín- y mostró sobre todo empaque y una mayor riqueza de recursos tácticos. Los triunfos obtenidos ante Nava, Aguas Santas y Avanca fueron buena muestra de ello, con el único borrón de la derrota ante el Ademar, fraguada en un mal primer tiempo.

Esas buenas sensaciones no serán óbice para que el sufrimiento continúe siendo el compañero de batallas de un Cangas con mucha juventud en su plantilla. Y es que el año se presenta como el decisivo para que jugadores como David Iglesias o Rubén Ribeiro puedan asumir un mayor peso, mientras que otros como Brais o el recién llegado Dani Fernández den un paso adelante. Con todo el equilibrio parece que será la mejor de las armas de los de O Morrazo, con una plantilla que ofrece más variedad y que en su gran mayoría puede actuar tanto en defensa como en ataque, lo que permitirá a los cangueses realizar el juego rápido que pretende su entrenador.

"Nuestra filosofía será reducir los cambios defensa/ataque al máximo y ser sólidos en las cuatro fases del juego, ya que el año pasado teníamos problemas en las transiciones, tanto ofensivas como defensivas", señala Moyano.

Por lo demás el técnico madrileño está muy satisfecho con el trabajo realizado hasta ahora, "porque hemos hecho muy buena pretemporada y el equipo está bien", a pesar de que reconoce que "hubiese preferido comenzar hace una semana porque teníamos todo preparado para ello, pero tampoco nos llega en mal momento este partido". Eso sí, frente a un Bidasoa que "si bien no es bailar con la más fea, tampoco es hacerlo con una de las guapas. Han dado un salto de calidad importante y son el equipo que más se puede acercar al Barcelona en los últimos años".

Con 19 jugadores en plantilla, incluyendo entre ellos al cadete Manu Pérez, Moyano deberá realizar dos descartes, además del del prometedor canterano. Los problemas físicos de alguno de sus jugadores podrían inclinar la balanza en las próximas horas. Los 18 disponibles por el momento son los porteros Javi Díaz y Gerard Forns; los centrales Santi López, Rubén y Ángel; los laterales David Iglesias, Muratovic, Ribeiro, Brais, Gayo y Baptista; los pivotes Alberto Martín, Cerqueira y Quintas; y los extremos Dani Fernández, Vilanova, Menduiña y Moisés Simes.