Mientras en la zona noble de la entidad la batalla por defender la legalidad del triunfo ante el Qabit Guadalajara ya se ha iniciado -ayer el club recibió el escrito del Comité de Competición incoando un expediente informativo- en la pista la plantilla y el cuerpo técnico del Frigoríficos del Morrazo tratan de aislarse del entorno y centrarse únicamente en el partido de mañana. Y es que el equipo cangués afronta una nueva final por la permanencia ante otro de sus rivales directos, el Puerto Sagunto, en un choque marcado en rojo y que podría servir para que los de Nacho Moyano se estrenen a domicilio y de paso obtengan un importante refuerzo moral de cara al futuro.
"Nosotros estamos centrados en lo que debemos. El ambiente está un tanto revueltillo, pero no es algo que dependa de jugadores y cuerpo técnico, por lo que no nos preocupa", señala el preparador madrileño. De este modo, la conjura para intentar traer algo positivo de tierras levantinas ya es un hecho. El Puerto Sagunto cuenta con 12 puntos en la tabla clasificatoria, tres más que un Cangas que podría acercarse un poco más a la zona de salvación. "Es evidente que vamos a ir a ganar, y que si lo hacemos nos meteremos de lleno en la pelea, pero si perdemos estaremos un poco más lejos de ellos", reflexiona Moyano.
La ocasión parece propicia para intentar romper las estadísticas del Frigoríficos a domicilio y sumar sus primeros puntos lejos de O Gatañal. "Por ser un rival directo y por proximidad en la tabla podría parecer un buen partido para hacerlo", señala el técnico madrileño, que también advierte de que "si analizamos los últimos partidos del Sagunto en su casa veremos que ha sacado adelante partidos ante rivales muy competitivos [victoria ante Granollers y empate frente al Cuenca]". Eso sí, Moyano recupera una de las sentencias de esta segunda vuelta, la de que "no podemos elegir" para tomarse el choque "como lo que es, otra final".
Puntuar, asume el preparador del conjunto cangués, significaría dejar al Cangas en una situación anímica idónea, a la que se uniría una deportiva también aparentemente benévola. "Sería un puntazo, ser capaces de ganar el segundo partido seguido y luego tendríamos dos encuentros en casa [Logroño La Rioja y Liberbank Cuenca]. Viviríamos esto de modo muy diferente", afirma. Eso sí, no cree que el hecho de poder encadenar un par de buenos resultados pueda eliminar mucha tensión en los suyos. "Eso no va a ocurrir a corto plazo. El equipo tiene tensión, está algo agarrotado y eso se ve mucho más en los partidos que en los entrenamientos, pero es la situación normal y hay que saber convivir con ella", razona.
Por lo demás, la buena noticia es que Valentin Kuran ya ha regresado a los entrenamientos con el resto de sus compañeros después del golpe sufrido en el choque ante el Guadalajara. El bielorruso, que estaba en su mejor momento desde su llegada a Cangas, apura sus opciones para poder estar a las órdenes de Nacho Moyano. Quien deberá aún esperar unos días más es Gerard Forns, que no viajará a Sagunto. La previsión es que el lunes reciba el alta y que intente estar disponible en el duelo del próximo miércoles ante el Logroño.
