El técnico asume que el estilo de juego quedará supeditado a lo que se vaya a encontrar en el vestuario cangués. "El entrenador tiene que ver primero cómo están los jugadores y a partir de ahí ajustarse a la plantilla, que es lo fundamental", afirma. Otero cuenta ya con una idea futbolística pero quiere conocer primero a sus pupilos para "ver si podemos desarrollar o no esa idea". Lo que será común a cualquier sistema o estilo por el que se decante es la clara apuesta por "ser un equipo, tener intensidad y trabajar para conseguir que lleguen los resultados".